Los microchips: la realidad supera a la ficción

Los chips de identificación humana se insertan bajo la piel de las personas. Una vez implantado, el paciente no puede quitárselo sin ayuda profesional.

MADRID · 04 DE DICIEMBRE DE 2006 · 23:00

,
El presidente de la compañía VeryChip –una de las especialistas en esta cuestión- llegó incluso a aconsejar al presidente George Bush que se los implantara a los inmigrantes. El objetivo es tenerles controlados. Ya existe un caso real de implantación de microchips en el cuerpo humano para pagar, y además, en España. Se trata de la zona VIP de un club idem de Barcelona, cuyos clientes (que suelen ir en traje de baño) no pueden guardar monederos ni billeteros, así que pagan por medio de este chip que les implantan en el brazo. Se suele promocionar bajo el lema "Identificar, Localizar, Proteger" en sociedades con problemas de inseguridad ciudadana. Los microchips suelen ser tan diminutos como un grano de arroz. Los adultos todavía son un poco más reticentes y temen por su intimidad, pero los compradores del futuro no tienen ningún problema en llevar un chip en el brazo, a modo de billetero. Los consumidores británicos están dispuestos a someterse a una implantación de microchip con tal de evitarse las molestas colas que se forman a la hora de pagar, ya sea con tarjeta de crédito o con dinero en metálico. Así se desprende de una encuesta realizada por el Instituto británico para el Estudio del Sector de la Alimentación (IGD), según la cual uno de cada diez adolescentes (y uno de cada veinte adultos), reconoce estar dispuesto a llevar un microchip dentro.

Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - Opinion - Los microchips: la realidad supera a la ficción