El plus de los derechos de los pobres

Tendríamos que comenzar los seguidores de Jesús por asumir los valores del Reino en su radicalidad, y sacarlos a la palestra pública.

22 DE OCTUBRE DE 2019 · 14:00

,

Yo creo que los evangélicos en España no nos destacamos por hablar y poner en relevancia los Derechos Humanos, así como en nuestra evangelización se habla más de lo divino que de un hecho fundamental en la extensión del Evangelio: la promoción social de las personas, esa dimensión de la projimidad que, en cierta manera, debería estar en relación de semejanza con la promoción del más allá, de lo metahistórico.

Aunque no nos distinguiéramos por la promoción y búsqueda del cumplimiento de los Derechos Humanos, sí hay una línea bíblica que deberíamos seguir, un camino que no solamente se nos traza en la vida, prioridades y de Jesús en la extensión del Reino de Dios, sino que se ve en todo el contexto bíblico: la promoción, el cumplimiento y la puesta en relevancia de los Derechos de los Pobres. El derecho de los pobres, ante los derechos humanos o cualquier otro derecho, debe tener un plus para los cristianos que emana de la propia Biblia.

Por tanto, se podría señalar una diferencia entre ambos derechos, unas características específicas de los derechos de los pobres. Mientras unos son humanos, como ya su mismo nombre indica y, por tanto, emanan de la voluntad, del humanismo y de la sociedad humana, los otros, a los que son acreedores los pobres de la tierra, emanan del mismo texto bíblico, de la enseñanza y práctica de vida de Jesús. Ese es un plus radical e importante, porque emanan de la Biblia y de las enseñanzas y valores del Reino, de una manera directa y radical. Si es así, ¿por qué no ponemos mucho más interés y énfasis en nuestras iglesias y en nuestros estilos de vida y prioridades cristianas en estos derechos? ¿Por qué no les damos ese plus?

No vamos a citar aquí todos los textos bíblicos que apoyarían este tema de los derechos de los pobres y cómo hemos de vivir la vida cristiana para coadyuvar a que estos derechos se cumplan. Estos derechos tienen un plus mucho más radical, fuerte y amplio en la Biblia con respecto a los derechos humanos, hasta el punto de que para ser sus seguidores, y para ser aprobados en ese Juicio de las Naciones, en orden nada menos que a nuestra salvación, se nos hace un test en esta línea. “Tuve hambre y no me disteis de comer”, nos lanza a un juicio condenatorio, en contraposición de “tuve hambre y me disteis de comer”, nos lanza a un juicio de salvación: “Benditos de mi Padre”.

No obstante, en la Biblia, los Derechos de los Pobres no están solamente en línea con el asistencialismo, sino que, ese plus, los relaciona con la búsqueda de la justicia y la lucha contra la opresión, así como con la denuncia de las estructuras de maldad al estilo de la denuncia profética. Por tanto, estos derechos tienen un plus enorme y claro de importancia espiritual con respecto a los Derechos Humanos. 

Para hacer una buena formulación de los Derechos de los Pobres, habría que tener en cuenta todas las enseñanzas de Jesús con respecto a las riquezas, a la necedad de los grandes acumuladores de este mundo, al mejor reparto de los bienes del planeta tierra que pertenecen a todas las criaturas de Dios, la situación de los marginados, pobres y excluidos de nuestro planeta, así como las causas de la pobreza. Habría que contemplar y estudiar la situación de los quebrantados y sufrientes de la tierra, los torturados, los apaleados por las desigualdades sociales. 

Para poder formular unos derechos de los pobres en nuestro planeta, habría que trabajar primero el tema de los valores, tantos valores antibíblicos y en contracultura con la Biblia como hay en el mundo y que, muchas veces, entran en nuestras iglesias ante la pasividad y aceptación de los propios cristianos. Tendríamos que comenzar los seguidores de Jesús por asumir los valores del Reino en su radicalidad, y sacarlos a la palestra pública como eliminadores de la pobreza, las desigualdades y las diabólicas acumulaciones desmedidas de bienes que dejan en la miseria, el hambre y la exclusión social a tantos y tantos millones de personas que hay en el mundo.

Sí. Los cristianos, basados en la Palabra de Dios, deberíamos ir cambiando estilos de vida, prioridades y valores, para ir preparando la formulación de una auténtica formulación de los Derechos de los Pobres según la Biblia. Quizás esto podría cambiar la vivencia de muchos cristianos cómodos que están en nuestras iglesias buscando los disfrutes espirituales de espaldas a los pobres de la tierra, de espaldas a los sufrientes del mundo, de espaldas al grito de los excluidos de los bienes de nuestro planeta. Si fuéramos realmente conscientes de ello, no me cabe duda de que se levantarían nuevos profetas en un mundo injusto que, de forma radical, practicaran la denuncia profética, la búsqueda de la justicia y la batalla, a voz en cuello, contra la opresión. Sólo así entenderíamos ese plus que la Biblia da a los Derechos de los Pobres.

Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - De par en par - El plus de los derechos de los pobres