Boby
― Entienda que este perro es un cruce de dos progenitores de muy diferente raza.
04 DE OCTUBRE DE 2019 · 07:10
Érase una vez un perro llamado Boby que no estaba en sintonía con su propio cuerpo.
Cuando corría no frenaba a tiempo y se despeñaba por los barrancos; cuando comía se inflaba como un globo sin tener conciencia de las dimensiones de su cuerpo; cuando ladraba le salía un silbo aflautado que desentonaba con su robusto cuerpo; cada vez que se rascaba con la pata se hacía profundas llagas, etc.
El dueño fue al veterinario y expuso el caso.
― Entienda que este perro es un cruce de dos progenitores de muy diferente raza: macho gigante y quizá hembra caniche y al parecer sus dos herencias no se han coordinado en él. Le puedo recetar unos sedantes que reduzcan su actividad física extrema.
― No, no, gracias, no lo quiero adormecido, intentaré adiestrarlo.
Saliendo de la consulta su pensamiento voló a un texto de los salmos: “Pon, oh Señor, temor en ellos; conozcan las naciones que no son sino hombres.”
También nos puede ocurrir que no estando en sintonía con nuestra condición humana, no conociéndonos, acabemos despeñados como Boby.
Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - Cuentos - Boby