Canción para empezar el año: “Sólo le pido a Dios”

“Sólo le pido a Dios”. No es un tema nuevo, tampoco está entre los más oídos en las cadenas de radio estos días, quizá porque ya no interese pedirle a Dios, quizá porque nos hemos acostumbrado a lo malo y no esperamos solución. Sin embargo, me estremezco cada vez que la escucho, ya sea en boca de Mercedes Sosa, o de Ana Belén.

Su desgarrador contenido llega hasta el corazón, conmueve. Habla por todos aquellos que sufren. Encierra el deseo grande de justicia, paz y amor. Defiende con su grito la denuncia social que abarca todos los tiempos y es tan universal que se adapta a todos los lugares del planeta, porque la justicia, la paz y el amor nunca llegan a encajar del todo entre nosotros, nunca hacen acto de presencia a raudales cuando más se necesita, sino que escasean en todas las regiones de la Tierra. Podría decir que su mensaje tiene para mí mucho más sentido y enjundia que algunas canciones que acostumbramos a entonar en nuestros cultos, que resultan manidas, cansinas y están faltas de compromiso. Recordémosla.

Sólo le pido a Dios

Sólo le pido a Dios
que el dolor no me sea indiferente
que la reseca muerte no me encuentre
vacía y sola sin haber hecho lo suficiente.

Sólo le pido a Dios
que lo injusto no me sea indiferente
que no me abofeteen la otra mejilla
después de que una garra me arañó esta suerte.

Sólo le pido a Dios
que la guerra no me sea indiferente,
es un monstruo grande y pisa fuerte
toda la pobre inocencia de la gente.
Es un monstruo grande y pisa fuerte
toda la pobre inocencia de la gente.

Sólo le pido a Dios
que el engaño no me sea indiferente
si un traidor puede más que unos cuantos
que esos cuantos no lo olviden fácilmente.

Sólo le pido a Dios
que el futuro no me sea indiferente
desahuciado está el que tiene que marchar
a vivir una cultura diferente.

Sólo le pido a Dios
que la guerra no me sea indiferente,
es un monstruo grande y pisa fuerte
toda la pobre inocencia de la gente.
Es un monstruo grande y pisa fuerte

toda la pobre inocencia de la gente.