¿A quién adoran los ángeles?

La adoración de la multitud angelical en Apocalipsis 5.11s.

28 DE OCTUBRE DE 2018 · 08:00

Un ángel, foto de Unsplash,angel, mujer alas
Un ángel, foto de Unsplash

Era una idea común en el judaísmo y en el cristianismo primitivo que los ángeles acompañan nuestro culto a Dios. La comunidad de Qumrán convocaba a los hijos de la luz a unir sus voces con los coros celestiales que adoran constantemente al Señor (Liturgia angelical, frag.2).

Por pequeño, frágil y aparentemente insignificante que fuera nuestro culto --aún si no llegara a los 28 del "coro unido" de vivientes y ancianos- ante Dios es hermoso y majestuoso, con el acompañamiento de todos los ángeles de la corte celestial.

"Millones de millones" de ángeles (5.11) debe entenderse como "totalmente innumerable", o sea, todos los ángeles del cielo. La palabra miríadas (traducido "millones") era el número más grande que conocían los antiguos (cf. Núm.10.36).

Pero Juan hizo algo que otras fuentes nunca hicieron: los coloca a todos alrededor del Trono y del Cordero (5.11). Así constituyen un nuevo círculo concéntrico, inmensamente más amplio que el de los ancianos, para adorar al Cordero.

Nuevamente Juan usa la palabra kúklô (alrededor; cf "ciclo" y ver también kuklóthen 4.3s). El siguiente coro extenderá el círculo a toda la creación (5.13).

El Trono y el Cordero son "el centro del centro", el fulcro del universo. Todo está ubicado "alrededor del Trono" (4.3s), hasta los últimos confines del universo. ¡Jesucristo es el Señor de todo y de todos y todas!

Esta enorme muchedumbre angelical eleva a gran voz una séptuple alabanza al Cordero (5.12 ¡sin mencionar al Padre!).

El hecho de que sean precisamente siete atribuciones del Cordero no es casualidad; significa la perfección completa de alabanza e implica claramente que el Cordero es Dios.

En la "liturgia angelical" de la comunidad de Qumrán se repetía innumerables veces la fórmula, "alábale con siete palabras maravillosas", "con siete palabras majestuosas", y otros términos parecidos.

En esto debe notarse la progresión desde el triple Sanctus de los vivientes (4.8) y el triple "dignus" de los ancianos (4.11), a la esencialmente monotemática alabanza de los 28 (5.9s), a la séptuple exaltación del Cordero por el coro multimillonario de ángeles.

El crescendo cualitativo corresponde al aumento cuantitativo en el proceso, de cuatro a doce a veintiocho a millones de millones.

Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - Bene studere - ¿A quién adoran los ángeles?