Arabia Saudí patrocina plataforma de diálogo entre musulmanes y cristianos del mundo árabe

Líderes de tradiciones cristianas orientales y musulmanes de distintas ramas participan en una nueva plataforma que procurará proteger a las religiones de sus expresiones violentas.

Redacción PD

VIENA · 26 DE FEBRERO DE 2018 · 19:54

La presentación de la nueva plataforma de diálogo, en el evento organizado en Viena este lunes. / Kaiciid,
La presentación de la nueva plataforma de diálogo, en el evento organizado en Viena este lunes. / Kaiciid

En los últimos años, la población cristiana en la región donde nació el cristianismo ha disminuido drásticamente a causa de los conflictos bélicos y la intensa persecución de grupos radicales islámicos, como el Daesh. Otras comunidades cristianas, como la iraní o la turca, sobreviven a pesar de las restricciones, en muchos casos gubernamentales, a la práctica de su fe. Otro gran bloque de países árabes han prohibido la práctica de cualquier religión que no sea el islam de la rama sunita wahabita que parte de Arabia Saudí y los Emiratos. Esta situación ha sido descrita como un “genocidio cristiano” hace poco más de tres meses por el presidente de Hungría, Viktor Orban.

Una de las políticas que se están intentando llevar a cabo para cambiar la situación es la del diálogo interreligioso, que acaba de abrir una nueva etapa con el patrocinio de Arabia Saudí, país que intenta sacudirse en los últimos meses el sambenito de “patrocinador” del terrorismo a nivel mundial.

Así, este lunes el KAICIID ha presentado la Plataforma para la Cooperación y el Diálogo Interreligioso del mundo árabe. Una iniciativa pionera, dado que participan representantes de las grandes religiones de la zona, incluyendo a cristianos y musulmanes, entre ellos: los grandes muftíes de Egipto y el Líbano, el Gran Imán de la Gran Mezquita de La Meca, los Patriarcas de las Iglesias Maronita, Armenia, Griega ortodoxa y Copta, así como los fundadores del KAICIID.

Según explica la organización, que celebra estos días un encuentro en su sede en Viena, la plataforma trabajará “en la promoción del diálogo interreligioso en la educación religiosa, los medios sociales y en las respuestas a los retos que encaran las sociedades árabes”.

En la puesta en marcha de la plataforma participan en total 23 altas autoridades religiosas que, según explican, “se han comprometido hoy para reconstruir y proteger a sus comunidades de los efectos de las acciones y retóricas extremistas y violentas”.

Se pretende que la plataforma se enfrente a “las ideologías que se aprovechan del estado de ansiedad para instigar el odio y el sectarismo, y afrontar de un modo conjunto los retos de sus comunidades”.

 

SALVAR LA RELIGIÓN DEL EXTREMISMO

En su discurso durante la presentación de la plataforma hoy, el Secretario General del KAICIID, Faisal Bin Muaammar, explicó: “La religión, especialmente en el Mundo Árabe, es una potente fuerza motivadora y una vía de identidad común para millones de personas. Durante demasiado tiempo, hemos permitido que la religión haya sido utilizada y apropiada como justificación para causar sufrimiento y dolor. Con la presentación de esta plataforma, los líderes de las comunidades religiosas dicen “basta” a este mal uso y perversión de la religión. Ha habido muchas palabras, pero pocos actos. A través de esta plataforma, conformaremos un ejemplo visible y tangible de cooperación interreligiosa. La gente necesita ver que las comunidades religiosas, trabajando juntas, son mucho más fuertes que cualquier extremista, y que la cooperación proporciona beneficios concretos a todo el mundo”.

Algunas de las actividades planeadas en la plataforma incluyen la formación para el clero, de forma que sepan orientar “a los jóvenes a resistir el extremismo violento, y el desarrollo de currículums educativos religiosos que promuevan el respeto por todas las religiones”.

El Cardenal Mar Bechara Boutros Al-Rai, Patriarca Maronita de Antioquía y Todo el Oriente, declaro: “Estamos decididos a hacer todo lo que esté en nuestras manos para salvaguardar a nuestras comunidades de la guerra, el extremismo y la violencia, especialmente la que se ejerce en nombre de la religión, y a implantar valores de diálogo, coexistencia pacífica y ciudadanía común. Deseamos todo el éxito a esta conferencia y poder ver los frutos de sus esfuerzos en la plataforma interreligiosa que se va a presentar aquí, con la confianza de que pondrá fin a la violencia en nombre de Dios y de la religión, salvaguardará la santidad del Señor y la dignidad de las religiones y la santidad de sus enseñanzas”.

El Sheij Dr. Shawki Allam, Gran Muftí de Egipto, afirmó que “el mundo está en necesidad extrema de plataformas de diálogo basadas en principios firmemente establecidos. Necesitamos un diálogo que respete nuestros contextos y no busque agitar los ánimos, el odio o imponer la hegemonía de unos sobre otros. Es un evento destinado a ofrecer una plataforma para el diálogo a los líderes religiosos e instituciones regionales del Mundo Árabe y del resto del mundo, con el fin de fomentar una coexistencia pacífica y una ciudadanía común”.

 

POLÉMICO APOYO SAUDÍ… Y ESPAÑOL

El KAICIID es una organización intergubernamental fundada por Arabia Saudí, Austria y España, con la Santa Sede como fundador observador.

Su principal objetivo es el diálogo interreligioso para la resolución de conflictos, aunque la financiación saudí ha hecho que muchos cuestionen este objetivo. Por ejemplo, en 2013 el partido socialdemócrata en Austria, junto a grupos activistas de libertad de expresión, pidieron el cierre del centro con sede en Viena considerando que solo buscaba mejorar la imagen internacional de ese país árabe, donde no existe ningún tipo de libertad de culto.

 

SITUACIÓN DE PERSECUCIÓN

Aunque el KAICIID se fundó en 2012, la situación de los cristianos en Oriente Medio no ha mejorado sensiblemente en la zona, más bien al contrario. Irak pasó de tener una comunidad de 1,5 millones de cristianos antes de la intervención militar occidental en Irak en 2003, a alrededor de 250.000 en la actualidad. En Siria, las cifras son más difíciles de calcular, pero se estima que el 50% de la población cristiana ha huido del país.

Aunque Arabia Saudí parece dar algunos pasos de apertura en libertad religiosa, todos los países árabes en la zona continúan restringiendo gravemente la libertad religiosa, condenando en sus legislaciones la conversión al cristianismo e impidiendo la celebración de cultos públicos o la distribución libre de materiales evangelísticos.

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