Costa Rica debate el papel de las iglesias en plena campaña electoral

El candidato evangélico Fabricio Alvarado, periodista y cantante, podría dar la sorpresa. El Tribunal Electoral ha prohibido expresamente a las iglesias evangélicas y católicas que se pronuncien sobre el voto.

Joel Forster , Redacción PD

SAN JOSÉ · 25 DE ENERO DE 2018 · 18:06

Fabricio Alvarado, candidato a la presidencia de Costa Rica. / Foto: Facebook oficial F. Alvarado,
Fabricio Alvarado, candidato a la presidencia de Costa Rica. / Foto: Facebook oficial F. Alvarado

Unos 3,3 millones de costarricenses deberán elegir el próximo 4 de febrero al nuevo presidente del país.

A poco más de una semana, las encuestas dan por primera vez a la posible victoria a un periodista, cantante y predicador evangélico.

Fabricio Alvarado, del pequeño Partido Restauración Nacional, habría subido de un 4% de intención de voto a un 14%-17%, compitiendo por la primera plaza con el hasta ahora favorito, Juan Diego Castro, del Partido de Integración Nacional (16%).

En un panorama electoral muy abierto, cuatro otros candidatos también tendrían opciones de pasar a segunda ronda, por lo que el 27% de indecisos decidirán los comicios.

 

POLÉMICA POR “IMPOSICIÓN” DE MATRIMONIO HOMOSEXUAL

La prensa ha apuntado a que el protagonismo del evangélico Alvarado tiene que ver con la última declaración de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que el 9 de enero recordaba que Costa Rica debe garantizar el respeto a las “identidades de género” y habilitar el matrimonio igualitario.

Alvarado, igual que varios otros candidatos, rechazó las presiones recordando que dos tercios de la población están en contra del matrimonio homosexual y la agenda LGBT.

 

El candidato evangélico Fabricio Alvarado, participando junto a su esposa en una de las marchas por la vida y la familia en Costa Rica. / Facebook F. Alvarado

El candidato fue más allá en los últimos días, diciendo que el CIDH “está violentando la soberanía de este país”, por lo que se plantearía, si fuera presidente, que Costa Rica abandone la institución.

 

CATÓLICOS Y EVANGÉLICOS: “NO OLVIDEN LAS CONVICCIONES CRISTIANAS”

En Costa Rica, el 60% de la población es católica y un 12% evangélicos.

Ambos grupos de fe comparten una visión de la familia que han defendido en un comunicado firmado por la Conferencia Episcopal y la Federación Alianza Evangélica Costarricense.

Según el diario El Espectador, el texto mencionaba “el valor absoluto de la vida humana desde su concepción” y que “la familia que se basa en el matrimonio debe encontrar el apoyo y protección del Estado, más allá de las imposiciones internacionales”.

Por ello, decían representantes católicos y evangélicos, “hacemos un llamado a todos los cristianos y a todos los ciudadanos a participar de las elecciones de 4 de febrero meditando delante de Dios y de sus consciencias su voto (...) A los candidatos les pedimos ser consecuentes con sus promesas de campaña, ser intolerantes con cualquier acto de corrupción y que nunca se olviden de los valores y convicciones cristianas”.

 

PROHÍBEN A LAS IGLESIAS PRONUNCIARSE

Como respuesta a ese comunicado, una orden cautelar del Tribunal Supremo Electoral (TSE) ha exigido a la Conferencia Episcopal y a la Federación Alianza Evangélica de Costa Rica que se “abstengan de difundir manifiestos públicos”.

Además, “el Tribunal también ordena a estas dos organizaciones instruir a sus sacerdotes y pastores sobre la prohibición de utilizar el púlpito, sitios de oración o ceremonias litúrgicas para inducir el voto de sus feligreses”.

La resolución avisa de “fuertes multas”, indicando que el artículo 136 del Código Electoral dice: “Es prohibida toda forma de propaganda en la cual, valiéndose de las creencias religiosas del pueblo o invocando motivos de religión, se incite a la ciudadanía, en general, o a los ciudadanos, en particular, a que se adhieran o se separen de partidos o candidaturas determinadas”.

El TSE ha dicho que, durante la campaña, ha recibido decenas de denuncias por supuesta propaganda religiosa de los candidatos. La mayoría tenían que ver con la campaña de Fabricio Alvarado.

 

UN ANÁLISIS

Para conocer el trasfondo de la campaña electoral de Costa Rica y las opciones del evangélico Fabricio Alvarado, ha respondido a preguntas de Protestante Digital el periodista costarricense Javier Bolaños.

 

Javier Bolaños, periodista costarricense.

Pregunta. Explícanos un poco sobre el trasfondo de Fabricio Alvarado: su partido y su trayectora profesional hasta el momento.

Respuesta. Fabricio Alvarado es un periodista que se hizo conocido a nivel nacional por su trabajo en el segundo canal de televisión más importante del país como presentador de noticias. Luego fue presentador del noticiero Mundo Cristiano de CBN. Además es un cantante cristiano (salmista) y actualmente diputado de la Asamblea Legislativa (Congreso). Al ser, en cierto modo, una figura conocida tanto a nivel secular como evangélico, decide postularse como candidato presidencial por su partido Restauración Nacional.

Este partido es uno de dos partidos políticos de tendencia evangélica en el país. Restauración Nacional ha logrado llevar al Congreso diputados en 4 elecciones consecutivas, su fundador es el pastor Carlos Avendaño, quien se está postulando para ser diputado y regresar a la Asamblea Legislativa por tercera ocasión.

P. Son las denuncias contra Alvarado y el aviso del TSE una forma de tratar de parar el ascenso del candidato?

R. Definitivamente sí. Una parte de la población, sobretodo el colectivo LGBTI y quienes apoyan a éste grupo, están sumamente asustados con la posibilidad de que un candidato con creencias tradicionales, basadas en los principios y valores cristianos, esté subiendo en las encuestas de manera tan vertiginosa y llegue a ser Presidente de la República.

Los comentarios en redes sociales hablan de que el país "volvería al Oscurantismo" y que se desataría una "cacería de brujas", si Fabricio llega a ser Presidente. Se ha montado una campaña de desprestigio contra su persona que ha ido desde los conocidos "memes" en redes sociales acuñándole declaraciones que él no ha dicho, se le han inventado supuestas relaciones homosexuales, hasta éstas denuncias ante el TSE. Es muy evidente que hay una "campaña sucia" en su contra que inició con su ascenso en las encuestas.

P. La Constitución habla de que: "No se podrá hacer en forma alguna propaganda política por clérigos o seglares invocando motivos de religión o valiéndose, como medio, de creencias religiosas". Ha incumplido Fabricio Alvarado este punto?

R. Es una línea delgada y hay que separar con bisturí la diferencia entre "creencias religiosas" y, principios y valores tradicionales. La sociedad costarricense está basada histórica y fundamentalmente en valores judeo-cristianos, ya desde ahí existe un matiz "religioso" intrínseco. Eso es algo que habría que revisar de la Constitución. Pero al llegar a una campaña política en que las discusiones sobre el futuro del país tienen que ver con si seguir o no ese modelo fundamental, resulta muy complicado separar lo político de lo religioso.

En lo que a Fabricio se refiere, creo que ha sabido ser prudente en cuanto a no usar un lenguaje explícitamente religioso o clerical durante su campaña política. Sin embargo, siendo él una figura conocida a nivel evangélico (como salmista y ex-presentador de un noticiero cristiano), es fácil confundir o malinterpretar esa línea que mencionaba anteriormente. Y eso, de cara a lo escrito en la Constitución, claramente es un arma en manos de sus adversarios.

 

La bandera de Costa Rica.

P. ¿Cómo se explica el ascenso tan fuerte en las encuestas en los últimos días?

R. El ascenso de Fabricio en las encuestas se da básicamente después de un fallo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, según el cual el Estado costarricense debe aprobar el matrimonio entre personas del mismo sexo y otorgarle a éstas ciertos "derechos" particulares. Todos los demás candidatos presidenciales se manifestaron a favor de acoger e implementar el fallo de la Corte durante sus eventuales Gobiernos.

Fabricio Alvarado ha sido el único candidato (con posibilidades reales) que se ha manifestado rotunda y claramente opuesto al fallo de la Corte y, por el contrario, ha dicho que en un eventual Gobierno suyo sacaría al país de la Corte Interamericana de Derechos Humanos por considerar que ésta no representa los principios y valores de la mayoría del pueblo costarricense, que No está de acuerdo con el matrimonio igualitario. La reacción de la población costarricense, que sigue apegada a esos valores y principios tradicionales, ha sido evidente al catapultar a Alvarado en las encuestas.

P. Si Alvarado pasara a segunda vuelta, ¿qué necesitaría para ganarse el apoyo mayoritario de la sociedad y ser presidente?

R. Algunas de las críticas mejor fundamentadas que desfavorecen a Fabricio, giran en torno a su falta de experiencia en la función pública. Él es un buen comunicador, pero carece de una trayectoria política y nunca ha ocupado un puesto en el Ejecutivo o en algún cargo público. Esto es incluso una preocupación dentro del mismo pueblo evangélico costarricense que es el que más lo apoya. Entonces, lo que se espera es que él sabiamente se sepa rodear de un buen equipo de asesores y sepa eventualmente escoger a un Gabinete que sí tenga esa experiencia de la que él carece.

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