Puigdemont proclama la independencia, pero pide que quede en suspenso

Puigdemont: “Asumo al presentarles los resultados del referéndum el mandato del pueblo de que Cataluña se convierta en un Estado en forma de República (...) Con la misma solemnidad, decimos que se suspenda la declaración de independencia para que empecemos un diálogo”.

Redacción PD

BARCELONA · 10 DE OCTUBRE DE 2017 · 14:37

Carles Puigdemont, durante su comparecencia. / Youtube,
Carles Puigdemont, durante su comparecencia. / Youtube

El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha declarado la independencia de Cataluña, pero suspendiéndola de inmediato para pedir una vía de diálogo y negociación con el Gobierno de España.

 

Algunas frases del discurso de Puigdemont:

“Soy consciente de que comparezco ante el pueblo de Cataluña y mucha gente. Es un momento excepcional, histórico, con consecuencias que irán más allá de nuestro país”.

“No esperen amenazas, chantajes, ni insultos. Es necesario no incrementar la tensión, al contrario”.

“Me quiero dirigir al conjunto de la población. A quienes se han movilizado y a quienes no. Todos, con nuestras diferencias y discrepancias, formamos un pueblo y necesitamos seguir construyéndolo juntos. Nunca podremos estar de acuerdo en todo, pero podemos demostrar que la forma de avanzar es con la democracia y la paz, el respeto por el que piensa distinto”.

“Esto no es una decisión personal, sino el resultado del 1 de octubre, de mantener el compromiso de autodeterminación y el análisis que hemos compartido”.

 

Sobre el referéndum y la actuación policial:

“El domingo se celebró el referéndum en unas condiciones extremas, en medio de violentos ataques policiales. La Policía y la Guardia Civil golpearon a personas indefensas. Lo vio todo el mundo, también el ámbito internacional. El objetivo era provocar el pánico general y que al ver esas imágenes la gente se quedase en casa. Los responsables políticos vieron como les salía el tiro por la culata”.

“Las operaciones y registros para incautar papeletas no lograron impedir el referéndum, ni tampoco las detenciones de los altos cargos, la persecución de personas, la violación de la correspondencia, no lograron impedir el referéndum. Cuando los ciudadanos llegaron, había urnas, papeletas y un censo fiable y operativo. Quiero expresar mi reconocimiento a todos los que hicieron posible este éxito”.

 

Situación de miedo:

“Soy consciente de que hay gente asustada. Gente de todas las ideas. La violencia gratuita y la decisión de las empresas de marcharse no tendrá efecto en nuestra economía”.

“Son hechos que reconozco que han contribuido a confundir el ambiente. A todos los que tienen miedo les mando un mensaje de tranquilidad. La democracia, el diálogo, la tolerancia, el respeto a la discrepancia… Actuaré siempre para todos los ciudadanos del país”.

 

La lectura de Puigdemont de la historia reciente:

“Quisiera explicar donde estamos. Cataluña no ha sido solo el motor económico de España sino un factor de estabilidad. Cataluña creyó que la Constitución de 1978 era un buen punto de partida.

Con el paso de los años, vemos que el edificio constitucional, las élites hegemónicas del Estado la consideraban un punto de llegada, y no de partida. Por coherencia con esta constatación, el 88% de este Parlament, siguiendo los procedimientos marcados por la Constitución, aprobó una propuesta de un nuevo Estatut de Autonomía. La propuesta desató una campaña de catalanofobia, animada por los que querían gobernar en España a cualquier precio. 

En el 2010, cuatro años después, el Constitucional emitió una sentencia que recortaba el Estatut por segunda vez. A pesar de seguir los procesos de la Constitución, el orden constitucional, a pesar de tener detrás el 88% de Cataluña, la acción combinada del Congreso y del Tribunal Constitucional, dejaron el texto irreconocible. Eso fue una humillación.

Desde la sentencia del TC el sistema político español no solo no ha movido un dedo, sino que además tiene un programa de centralización. Esto ha tenido un impacto profundo en la sociedad catalana. Por eso muchos han llegado a la idea de que se constituya un Estado independiente.

Se ha forjado un consenso amplísimo de que el futuro de Cataluña debe ser decidido por los catalanes a través de un referéndum.

Con el objetivo de hacer posible este referéndum, se han puesto en marcha muchas iniciativas. Hasta dieciocho veces se ha pedido acordar un referéndum como el que se celebró en Escocia.

Si esto se pudo hacer en unas de las democracias más antiguas, ¿por qué no se pudo hacer aquí? Hemos recibido una negativa radical y absoluta combinada con la persecución de las instituciones catalanas”.

“Se han presentado querellas por permitir que el Parlament pudiera debatir. La última ola represiva ha implicado el traslado de servidores del Gobierno público de Cataluña”.

“El pueblo de Cataluña reclama libertad para poder decidir. Es muy sencillo. No hemos encontrado interlocutores en el pasado ni en el presente. Nadie quiere hablar de esta demanda de la mayoría de este Parlament”. 

 

Dirigiéndose al pueblo en España, en castellano:

“Les transmito una voluntad de diálogo. Soy consciente de que la información que les trasladan y la narrativa que se ha instalado”. 

“No somos unos delincuentes. No somos unos locos, ni unos golpistas. Somos gente normal que pide poder votar”.

“No tenemos nada contra España y contra los españoles. Nos queremos entender mejor. La relación no funciona, y nada se ha hecho para revertir una situación insostenible. No se puede obligar a un pueblo a un quorum que no comparte y no quiere”.

 

Sobre la independencia:

“Con los resultados del referéndum, Cataluña se ha ganado el derecho a ser un estado independiente, ser escuchada y respetada”.

“El sí a la independencia ha ganado unas elecciones y un referéndum bajo una lluvia de golpes de porra. Las urnas dicen sí a la independencia”.

“Hay un antes y un después del 1 de octubre. Llegados a este momento, asumo al presentarles los resultados, el mandato del pueblo de que Cataluña se convierta en un Estado en forma de República”.

“Por responsabilidad y por respeto, y con la misma solemnidad, decimos que se suspenda la declaración de independencia para que empecemos un diálogo. Creemos que el momento pide la voluntad clara para avanzar en las demandas”.

“Se han puesto en marcha distintas iniciativas de diálogo. Algunas son públicas, otras no lo son pero lo serán. Son serias y eran difíciles de imaginar. Nos piden que abramos un tiempo para el diálogo. Lo hago pidiendo responsabilidad y respeto”. 

“Pido al Gobierno que escuche, que renuncie a la represión. Le pido a la Unión Europea que se implique a fondo”.

Hoy el Gobierno de Cataluña volvemos a dar la mano al diálogo. El conflicto se puede resolver de forma acordada si todos ponemos de nuestra voluntad. Queremos un futuro digno”.

 

RESPUESTA DEL GOBIERNO

El Gobierno de España ha rechazado la declaración de independencia suspendida, aunque no ha avanzado inmediatamente cuál será su respuesta.

La vicepresidenta de Gobierno Soraya Sáenz de Santamaría ha comparecido para explicar que el Gobierno estudiará mañana la respuesta adecuada. Pero ha adelantado que “no se puede aplicar una ley que no existe, ni apropiarse de la voluntad del pueblo catalán como lo ha hecho” Puigdemont.

Asimismo, la vicepresidenta ha informado de los “contactos” que Rajoy mantiene a lo largo de la noche con los líderes de los partidos políticos en el Congreso.

Además ha informado que “mañana el presidente del Gobierno reunirá al consejo de ministros para abordar los próximos pasos”.

“El presidente comparecerá mañana, a petición propia, en el Congreso de los diputados, para informar de la situación en Cataluña”, ha añadido Sáenz de Santamaría.

 

EXPECTATIVA PREVIA

El Parlament de Cataluña se reunió esta tarde en una cita que podría resultar clave para el desarrollo de los próximos acontecimentos.

Con incertidumbre y expectación, los ojos están puestos en Cataluña esta tarde, ante una posible declaración unilateral de independencia (DUI). En caso de que esta se formalice, el Gobierno de España avisa que está “preparado” para dar respuesta de acuerdo a la legalidad y al marco constitucional, el cual fue defendido con firmeza por Felipe VI en el discurso del pasado martes.

El presidente de la Generalitat Carles Puigdemont compareció para explicar los resultados del referéndum -declarado ilegal por el Tribunal Constitucional- y lo que considera que son los pasos a seguir por parte del Parlament. 

Hace algo más de un mes el Parlament, con la ausencia de sus escaños de toda la oposición, se aprobó la Ley de Transitoriedad, la cual establece un marco de transición de un año en el que Cataluña formalizaría una Constitución propia.

El Gobierno de España ha avisado de que una declaración unilateral de independencia tendría consecuencias, entre las que se contempla la aplicación del Artículo 155 de la Constitución.

Esta tarde, el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, ha pedido a Puigdemont que “respete el orden constitucional y no anuncie una decisión que haga imposible el diálogo. La diversidad no debería llevar a conflictos cuyas consecuencias serían obviamente muy malas para Catalunya, España y toda Europa”.

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