Completo en ti

La armonía produce la sensación anímica de alegría contenida, que casa perfectamente con el ya pero todavía no de nuestra santificación y nuestra glorificación.

17 DE FEBRERO DE 2017 · 08:20

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En la actualidad parece que no podemos cantar un himno si no le añadimos un estribillo o le cambiamos la música.

Este procedimiento no es nuevo, pues existen precedentes como el himno que hoy nos ocupa: Complete in Thee de Aaron Robarts Wolfe, escrito en 1851.

El estribillo es obra de James Martin Gray, nacido el año de composición del himno; la melodía con la que se suele cantar pertenece a Ben Nyce (a quien agradecemos su amabilidad al concedernos el permiso para utilizarla en nuestra traducción) y fue compuesta en 2003.

Ahora bien, esta excepción no justifica la adición indiscriminada de estribillos repetitivos que poco o nada añaden a los himnos a los que acompañan.

 

Aaron Robarts Wolfe.

Tomemos como ejemplo el himno mencionado: el estribillo añadido subraya la doctrina contenida en las estrofas respetando la métrica y la rima de las mismas, aunque hay que reconocer que sin él, el himno no perdería ni un ápice de su valor intrínseco.

Analicemos brevemente la música de Ben Nyce: ¿Qué la diferencia de las melodías que suelen sustituir a las tradicionales de nuestros himnos? En primer lugar, que no es repetitiva; abarca una tesitura adecuada para la voz, sin caer en la monotonía.

En segundo lugar, que al no ser continuamente sincopada, favorece el canto congregacional. Y por último, que el uso de los modos mayor y menor está hábilmente utilizado para realzar la letra en todo momento, es decir, está al servicio del texto, logrando así que la armonía produzca la sensación anímica de alegría contenida que casa perfectamente con el ya pero todavía no de nuestra santificación y nuestra glorificación.

Esperamos que esta nueva traducción sirva a la iglesia contemporánea para cantar con inteligencia a Dios, porque él es el Rey de toda la tierra (Salmo 47:7).

 

COMPLETO EN TI

Letra: Aaron R. Wolfe, estrofas, 1851; James M. Gray, 1851-1935, estribillo. Traducción: Andrés D. Messmer, 2014. Adaptación: Santiago Míguez de la Rosa, 2014. Música: Ben Nyce, 2003; © Ben Everson Music.

 

Do Sol

Completo en ti, pues no hay acción

Lam Fa

que en tu lugar me dé el perdón;

Do Sol6

tu sangre lo compró por mí

Fa Sol Do

y ahora estoy completo en ti.

 

Do Sol

Justificado por ti estoy,

Lam Sol Fa

santificado, salvo soy.

Do Sol

Cuando ante ti rendido esté,

Lam Sol6 Do

glorificado yo seré.

 

Completo en ti no vence el mal,

tu gracia ahora es mi puntal.

El tentador huirá de mí,

y en pie estaré, completo en ti.

 

Completo en ti ya no hay afán,

pues suples día a día el pan.

Me das lo bueno para mí,

no pido más; ¡completo en ti!

 

Buen Salvador, cuando ante el Juez,

santos de toda lengua y tez

se postren, me verás a mí,

junto a tus pies, completo en ti.

 

Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - Salmos, himnos y cánticos espirituales - Completo en ti