“Los traficantes abusan de la desesperación de los niños refugiados”

Entre los refugiados que llegan a Europa, miles de niños han desaparecido, muchos en redes de trata. La campaña #BuscameEuropa presiona para saber donde están, ayudarlos y protegerlos de los traficantes.

Daniel Hofkamp

BARCELONA · 27 DE ABRIL DE 2016 · 16:16

Refugiados sirios, en 2014. / Sandra González, Flickr,refugiados sirios
Refugiados sirios, en 2014. / Sandra González, Flickr

Dentro de la misma crisis de refugiados que vive Europa en los últimos meses hay otras crisis que a veces pasan desapercibidas. A principios de este año, Europol afirmaba que unos 10.000 niños habían “desaparecido”, de los 260.000 que habían entrado al continente en los últimos meses.

¿Qué ha pasado con estos menores? Según la misma Europol, una gran parte podrían estar en manos de mafias dedicadas al tráfico de personas. Estos menores suelen terminar siendo víctimas de explotación sexual.

Varias organizaciones humanitarias han alertado del problema, entre ellas A21, que está desarrollando desde hace una semana la campaña de sensibilización #BuscameEuropa. Loida Muñoz, directora nacional del Equipo A21 en España, nos explica cómo se está afrontando este problema, marcado por la escasez de información oficial y el peligro del crecimiento de las mafias en los últimos meses.

 

Pregunta. ¿En qué consiste la campaña #BuscameEuropa?

R. Hemos visto esta necesidad. Europol informó que hay unos 10.000 niños refugiados desaparecidos en Europa. La semana pasada hemos sabido de 6.000 niños que han desaparecido en Alemania. Aunque somos conscientes de que no todos estos niños están en redes de tráfico, sí sabemos que muchos están siendo captados por los traficantes, que están creando nuevas rutas. Al ver esta situación, sintiéndonos algo impotentes, hemos visto que era importante hacer algo que ayude a la sensibilización. Preguntándonos por qué está pasando con estos niños en nuestro continente.

 

P. ¿Por qué los niños son objetivo de las mafias?

R. Son los más vulnerables, tanto por la inocencia que tienen, o porque quedan desprotegidos. En la crisis de refugiados hay muchos llegando en soledad, algunos se que han perdido a su familia en el camino, hay familiares que intentan buscarles mejores vías para sobrevivir y los envían solos... Pero no sólo eso, también hay que tener en cuenta que muchos niños son secuestrados o engañados por mafias que los explotan sexualmente. El comercio sexual en niños es de una edad cada vez más baja. La media de las víctimas de trata a nivel mundial es de 12 años. Los clientes demandan “carne fresca”, así que hay un comercio de esclavos que demanda cada vez una edad menor.

 

P. ¿Es muy difícil rescatar a un menor que ha sido captado por una mafia?

R. Más que difícil el rescatar, es difícil identificar quiénes son estos niños, donde están. Estamos viendo que hay carencias logísticas, administrativas, legales, que nos impiden conocer exactamente qué ha pasado con estos niños. Para poder rescatarlos tenemos que saber donde están.

 

P. ¿Se está haciendo algo para evitar el secuestro o la venta de menores en el ámbito gubernamental, de seguridad, o en instancias políticas?

R. La realidad a nivel político y gubernamental es complicada. Europa se está viendo desbordada, y es un problema dentro de un gran problema. Hay algunas acciones pero son mínimas. Tenemos que reclamar que se haga más. Pero no sólo debemos mirar a los políticos, es algo que nos toca a todos como Europa, como parte de lo que somos. Campañas como esta son importantes para presionar de forma que se tomen más medidas.

 

P. ¿Cómo entidad, os habéis implicado en esta labor?

R. Hemos empezado la campaña #BuscameEuropa pensando que sensibilizar es algo fundamental, para poder atajar un problema. La sensibilización lleva a la acción. La campaña es sencilla, consiste en cambiarse la foto de perfil, y usar el hashtag de #BuscameEuropa y difundir noticias de lo que se está haciendo. 

Llevamos una semana y hay mucha gente ya implicándose. Varios medios se han hecho eco, la respuesta es muy buena.

Como A21 también estamos trabajando en el terreno. En Grecia tenemos un equipo donde estamos dando asistencia, previniendo con respecto a la trata. Hace una semana 77 personas fueron rescatadas de manos de traficantes gracias a la labor de la policía junto a la denuncia de nuestra entidad. También hemos preparado en contenedores de mercancía un espacio con aseos para los refugiados, y estamos dando indicaciones preventivas con respecto a la trata. 

 

La campaña de A21 comparte esta imagen.

P. En las últimas semanas ha habido cambios legales con respecto a la acogida de refugiados, pero éstos siguen llegando a Grecia.

R. Sí, hay que entender que no salen de sus países porque quieren, sino que huyen. Es lo que haría cualquiera de nosotros, intentar sobrevivir. Las acciones legales no van a frenar el instinto vital de querer buscar algo mejor para ti o más aún, para los tuyos. Lo que no debemos olvidar es que son personas vulnerables, que llegan tras una travesía muy dura y que los traficantes están merodeando. Hace poco nos contaban que habían conocido a un chico que en un campo de refugiados se hacía pasar por médico para tener contacto y traficar con personas. 

Hay una desesperación tan grande que los traficantes están aprovechándose de su debilidad para traficar con ellos, generar rutas de tráfico, con mafias conectadas en diversos países de Europa. Lo que podemos hacer como organizaciones es tener personas preparadas para identificar a víctimas de trata como a traficantes, a aquellos que intentan aprovecharse.

A veces olvidamos que aún los traficantes suelen proceder de situaciones muy complicadas. Por eso es importante la sensibilización, ya desde edad temprana, para que las personas estén advertidas de los peligros de la trata. Otra faceta mejorable es la legislación, de forma que las penas por tráfico de personas sean más duras.

 

P. En otras ocasiones hemos hablado sobre prostitución, y cómo impulsa la trata. ¿Sucede también en el caso de los refugiados?

R. Sí, en estos meses hemos rescatado a varias chicas. Es el perfil que buscan, chicas jóvenes. Es un comercio y los traficantes intentan buscar aquello que puedan vender mejor. El engaño, la coacción que practican los traficantes, suele ir dirigida sobre todo a mujeres y a niños, cuando tiene que ver con la explotación sexual, y a hombres cuando se refiere a explotación laboral.

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