De bebés y contenedores

Por un lado se critica que una madre tire a su hijo a un contenedor de basura y por otro se apoya que bebés nonatos puedan ser lanzados a otro tipo de contenedores en los quirófanos.

18 DE JULIO DE 2015 · 17:35

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 Hace pocos días nos escandalizamos con la noticia del rescate de un bebé de dos semanas de vida que fue arrojado a un contenedor. La madre ha sido detenida y acusada de un delito de asesinato en grado de tentativa.

La mujer tiene tres hijos más y comenta que se agobió con el cuarto.

Se ha producido un milagro. Gracias al Señor el bebé se encuentra bien y ya ha sido dado a una familia en régimen de acogida urgente.

Las criticas a esta mujer han sido cuantiosas y con razón. No se entiende como alguien puede deshacerse de su propia descendencia.

Los medios de comunicación se han frotado las manos y han dado la noticia a todas horas del día para que nos enterásemos bien de lo que es capaz de hacer una mala madre. Las cámaras han hecho virguerías al enfocarla para que pudiésemos verla.

La detenida fue descubierta gracias al grupo sanguíneo y al biberón con el nombre del hospital que iba dentro de la mochila. Ha pasado a disposición del Juzgado de Instrucción número 4 de Coslada. Cumplirá la condena que se sea impuesta.

Al mismo tiempo que se produce esta noticia, tenemos otra bien latente: La ley del aborto. El problema no está en abortar sino en si las chicas tienen obligación de comunicárselo a los padres. En este caso lo de menos es la criatura. Y ahí es donde se me rompen los esquemas. Por un lado se critica que una madre tire a su hijo a un contenedor de basura y por otro se apoya que bebés nonatos puedan ser lanzados a otro tipo de contenedores en los quirófanos. Además se exige el anonimato. No habrá prensa ante estos casos. No acudirán las cámaras para enfocar a la madre ni a quienes la atienden. No se comunicará a la familia. Y no me aclaro, señores, no me aclaro. No entiendo como hay mentes humanas que pueden amparar ambos conceptos a la vez siendo tan antagónicos.

No me cabe la menor duda de que muchos de los que critican el caso de Mejorada del Campo en Madrid, están a favor del aborto. Total, entre un caso y otro sólo hay varios meses de diferencia y lo que en un momento determinado es un bebé, en otro no es nada aunque su corazón lata con fuerza. Vamos, vamos, para volverse locos.

Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - Actualidad - De bebés y contenedores