Jesús el compasivo

Eres tú mi buen Jesús, el compasivo, aquel que con maestría ejecuta amor y me hace comprender lo mucho que necesito parecerme a ti.

20 DE FEBRERO DE 2015 · 17:42

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¡Con cuánta misericordia te has allegado a mí!

Tus ojos miran con benignidad los estragos del pecado en mi ser.

Te muestras con ternura y mirando con compasión haces que todo tenga sentido.

Dejo de estar en la linde del camino, detenida y sin fuerzas para formar parte de tu grey.

Te miro y me asombra verte tan cercano a mí.

Sigues sorprendiéndome, como lo hacías antaño, nunca cesan tus misericordias.

Quiero ser rociada por esa bondad y dejarme empapar por tu comprensión, sólo así estaré preparada para poder mirar lo que me rodea con ojos de amor.

Eres tú Jesús compasivo, el que me alecciona con pautas a seguir en este difícil sendero de peregrinación.

Eres tú ese modelo del que tanto tengo que aprender.

Tus ojos se posaron en la multitud, en los enfermos, en aquellos locos endemoniados, en esa escoria desahuciada, alejada de las aldeas y confinadas a vivir una vida sin nada más que dolor.

Tu infinita misericordia traspasaba lo racional y buscaba en el corazón la rendija abierta para depositar esas gotas preciadas del bálsamo sanador.

Tú, conquistador de almas, nunca subestimaste a quienes carentes de todo lo necesitaban todo.

Mujeres desbaratadas por el pecado, enfermas, viudas, fueron premiadas por esa mirada compasiva y recibieron vida.

Hombres endemoniados, ciegos, mudos, sordos, fueron sanados gracias a tu trazo amable, tus manos extendidas mostrando favor.

¡Quiero aprender a mirar así!

Aún hoy tu misericordia sigue fluyendo, sigues sanando, quebrando, acariciando vidas con tu inefable compasión.

Una compasión que no entiendo, que se me escapa de las manos cuando intento asirla para alcanzar su completo significado.

Una forma de amar incomparable que me lleva a precipitarme en una cascada de preguntas sin respuesta.

Eres tú mi buen Jesús, El compasivo, aquel que con maestría ejecuta amor y me hace comprender lo mucho que necesito parecerme a ti.

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