¿Pueden perder la salvación los cristianos?

Cuando el pecador ha recibido la nueva vida del Espíritu experimenta un cambio radical; se ha convertido en una nueva criatura. ¿A quién pertenece la salvación? ¿Puede un genuino cristiano dejar de serlo?

15 DE JULIO DE 2017 · 20:55

,

“Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios; por la hipocresía de mentirosos que, teniendo cauterizada la conciencia, prohibirán casarse, y mandarán abstenerse de alimentos que Dios creó para que con acción de gracias participasen de ellos los creyentes y los que han conocido la verdad.

Porque todo lo que Dios creó es bueno, y nada es de desecharse, si se toma con acción de gracias; porque por la palabra de Dios y por la oración es santificado. Si esto enseñas a los hermanos, serás buen ministro de Jesucristo, nutrido con las palabras de la fe y de la buena doctrina que has seguido.

Desecha las fábulas profanas y de viejas. Ejercítate para la piedad; porque el ejercicio corporal para poco es provechoso, pero la piedad para todo aprovecha, pues tiene promesa de esta vida presente, y de la venidera.

Palabra fiel es esta, y digna de ser recibida por todos. Que por esto mismo trabajamos y sufrimos oprobios, porque esperamos en el Dios viviente, que es el Salvador de todos los hombres, mayormente de los que creen.

Esto manda y enseña.

Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza. Entre tanto que voy, ocúpate en la lectura, la exhortación y la enseñanza. No descuides el don que hay en ti, que te fue dado mediante profecía con la imposición de las manos del presbiterio.

Ocúpate en estas cosas; permanece en ellas, para que tu aprovechamiento sea manifiesto a todos. Ten cuidado de ti mismo y de la doctrina; persiste en ello, pues haciendo esto, te salvarás a ti mismo y a los que te oyeren.” (01) 

 

Notemos, para empezar, que Pablo no dice ‘muchos’ sino ‘algunos’. La tendencia a hablar solo de números, puede hacernos perder de vista la enseñanza principal. Dentro de la muchedumbre de la ilustración se puede diferenciar a unos de otros en base a una cualificación determinada. Por ejemplo, si decimos ‘algunos de los allí presentes son extranjeros’ no estamos expresando un número; pero estamos dando a entender que no todos allí tienen la misma nacionalidad.

En segundo lugar, existe una cuestión de contexto a no dejar de tener en cuenta. Si la foto refiere a una muchedumbre escuchando a un político en campaña electoral, el término ‘algunos’ podría aplicarse a los que llegaron allí para decidir si lo votarían o no después de escucharle. Se daría a entender así que no todos los presentes en ese sitio y ocasión son ‘votos cantados’ a favor de tal político (aunque este lo exhiba como tal).

En tercer lugar, y para entrar de lleno en nuestro tema, conviene recordar que cuando el Maestro de Galilea iba camino de Jerusalén: “alguien le dijo: Señor,  ¿son pocos los que se salvan?  Y él les dijo: Esforzaos a entrar por la puerta angosta;  porque os digo que muchos procurarán entrar,  y no podrán”. (02) 

Jesús tenía la virtud de leer la intención que había detrás de lo que se le preguntaba. En este caso quien preguntó era ‘alguien’, un anónimo entre muchos anónimos. El interés de esa persona era nada más saber de manera indirecta cómo beneficiarse con el favor de Jesús hacia todos. El Maestro no le respondió respecto de los ‘pocos’ que se salvan sino de los ‘muchos’ que se pierden; explicó con claridad la razón de ello e hizo una recomendación a todos, sin excepción. Su respuesta hizo enmudecer a la persona que le había preguntado, pues Lucas no vuelve a mencionarlo.

Como podemos apreciar, es importante saber con qué intención preguntamos o afirmamos al hablar.

 

Cristianos y apostasía

¿Qué entendemos por ‘cristianos’? Que no está usado aquí como un adjetivo, sino como un sustantivo en plural; el mismo que fue acuñado en Antioquía (03) para distinguir a los seguidores de Jesucristo.

Paso, a continuación, a reproducir un artículo que resume – mejor que yo - lo que deseo decir (04):

“Un cristiano es una nueva criatura. ‘De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas’. (05) Esta frase habla de una persona que se ha convertido enteramente en una nueva criatura, como resultado de estar ‘en Cristo.’ Para que un cristiano perdiera la salvación, la nueva creación tendría que ser revertida y cancelada.

Un cristiano es redimido. ‘Sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación.’ (06) La palabra ‘redimido’ se refiere a una compra que ha sido hecha, a un precio que ha sido pagado. Para que un cristiano perdiera la salvación, Dios tendría que revocar Su compra por la que pagó con la preciosa sangre de Cristo.

Un cristiano es justificado. ‘Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo.’ (07) ‘Justificar’ significa ‘declarar justo.’ Todos los que reciben a Jesucristo como Salvador son ‘declarados justos’ por Dios. Para que un cristiano perdiera la salvación, Dios tendría que desdecirse de lo dicho en Su Palabra y retractarse de lo que Él declaró previamente.

A un cristiano se le promete la vida eterna. ‘Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en Él cree, no se pierda, más tenga vida eterna.’ (08) La vida eterna es una promesa de vida para siempre en el Cielo con Dios. Dios hace esta promesa – ‘cree, y tendrás vida eterna.’ Para que un cristiano perdiera la salvación, la vida eterna tendría que ser retirada. Si a un cristiano se le ha prometido vivir para siempre, ¿cómo entonces puede Dios romper esta promesa, quitándole la vida eterna?

A un cristiano se le garantiza la glorificación. ‘Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó.’ (09) Como lo aprendemos la justificación es declarada al momento de la fe en Cristo. (10) De acuerdo a la Escritura, la glorificación está garantizada para todos aquellos a quienes Dios justifica. (11) La glorificación se refiere a un cristiano recibiendo un perfecto cuerpo glorificado en el Cielo. Si un cristiano pudiera perder la salvación, entonces esta Palabra sería un error, porque Dios no puede garantizar la glorificación para todos aquellos a quienes Él predestinó, llamó, y justificó. 

Podrían compartirse muchas más ilustraciones de lo que ocurre en la salvación. Sin embargo, aún estas pocas hacen abundantemente claro que un cristiano no puede perder la salvación. La mayor parte, sino todo lo que la Biblia dice que ocurre a una persona cuando recibe a Jesucristo como Salvador, sería invalidado si la salvación pudiera perderse.

La salvación no puede ser revertida. Un cristiano no puede ser des-creado como nueva criatura. La redención no puede ser deshecha. La vida eterna no puede perderse y seguir considerándose como eterna. Si un cristiano perdiera la salvación, Dios tendría que retractarse de Su Palabra y cambiar de parecer – dos cosas que la Escritura nos dice que Dios jamás hace.

Las objeciones más frecuentes a la creencia de que un cristiano no puede perder la salvación son:

 

1.¿Qué hay de aquellos que son cristianos y continuamente viven una vida inmoral?

2. ¿Qué pasa con aquellos que son cristianos, pero luego rechazan la fe y niegan a Cristo? 

 

El problema con estas dos objeciones es la suposición de que ‘son cristianos’. Frente a ellas: la Biblia declara que un verdadero cristiano ya no continuará viviendo una vida inmoral (12); y que alguien que se separa de la fe, demuestra que realmente nunca fue un cristiano. (13) 

El Apóstol Pablo está hablando con Timoteo como todo padre debiera hablar con un hijo. Le está advirtiendo sobre un flagelo que ya había comenzado en sus días y ha aumentado en estos debido a la profecía que en ‘los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe’ se va cumpliendo inexorablemente.

Como bien afirma el artículo mencionado “Lo que el Apóstol está afirmando es que no todo lo que cae bajo el término de ‘cristiano’ lo es. Más aún, que se puede pasar al frente en una campaña de evangelización, se puede rellenar el formulario de ‘aceptación de Cristo’, se puede hacer una oración repitiendo lo que se le dicta, o se puede nacer en un hogar cristiano y, con todo, no ser un ‘cristiano’. Mientras que cada una de estas cosas puede ser parte de la experiencia cristiana, no son éstas las que ‘hacen’ a un cristiano. Un cristiano es una persona que ha recibido por fe a Jesucristo, ha confiado (y confía) totalmente en Él como su único y suficiente Salvador.” (14) 

 

Conclusión

La iglesia de Dios es la que edifica Jesucristo. Es un cuerpo espiritual cuya única cabeza es el Hijo de Dios; edificio que Él construye con piedras vivas unidas a la Roca y piedra de sostenibilidad que es Cristo Jesús. Las iglesias locales están siendo acosadas por una horda de falsos maestros que brotan y pululan por todas partes, especialmente en América Latina. Pertenecen a ‘ministerios’ diseñados mayoritariamente en América del Norte para ser exportados a todo el mundo (15) bajo distintos nombres.

Esos herejes cautivan a las gentes que gustan oír dulzuras y promesas de un mejor pasar: próspero, con salud y desarrollo material, que satisfaga su necesidad de sobresalir sobre los demás. El genuino cristiano sabe que no perderá la salvación porque ella le pertenece al Señor de señores y Rey de reyes. (16)

“Nada puede separar a un cristiano del amor de Dios (17). Nada puede arrebatar a un cristiano de la mano de Dios (18) Dios quiere y tiene el poder para garantizar y mantener la salvación que Él nos ha dado. ‘Y Aquel que es poderoso para guardaros sin caída, y presentaros sin mancha delante de su gloria con gran alegría, al único y sabio Dios, nuestro Salvador, sea gloria y majestad, imperio y potencia, ahora y por todos los siglos. Amén.’(19)

 

-------ooooooo0ooooooo-------

Notas

Ilustración: foto de una muchedumbre, sin distinción del motivo por el que está convocada.

01.   1ª Timoteo 4.

02.   Lucas 13:22-24.

03.   Hechos 11:26.

04.   Got Questions ministries; enlace: https://www.gotquestions.org/Espanol/perdida-salvacion-cristiano.html 

05.  2ª Corintios 5:17.

06.  1ª Pedro 1:18,19.

07.   Romanos 5:1.

08.   Juan 3:16.  

09.  Romanos 8:30.

10.  Ibíd. 5:1.

11.  Ibíd. 8:30.

12.  1ª Juan 3:6

13.  Ditto 2:19.

14.  Juan 3:16; Hechos 16:31; Efesios 2:8,9.

15.  Este autor NO ES ‘anti norteamericano’ ni ‘PRO comunista’ como alguno se deleita en tildarlo. Sí: está a favor del Evangelio de Jesucristo dentro de todo el consejo divino revelado en las Escrituras. Y no está de acuerdo con evangélicos identificados con políticas ultraconservadoras del GOP (Partido Republicano), y tildan de ‘comunistas’ a los que no estén de acuerdo con ellos.

16.  Salmos 3:8; 37:39; 68:19,20; Jonás 2:9; Zacarías 9:9; Lucas 3:6; Apocalipsis 12:10; 19:1.

17.  Romanos 8:38,39.

18.  Juan 10:28,29.

19.  Judas 24,25.

Importante: Todas las citas son de este autor, salvo las del artículo citado. Las negritas son énfasis de este autor.

Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - Agentes de cambio - ¿Pueden perder la salvación los cristianos?