El libre albedrío ¿ayuda o complica?

Algunas prédicas corrientes ponen el peso de la salvación en la decisión humana con frases como ‘Acepta a Cristo’; ‘Decídete y cree’, ‘Haz la oración de fe’, etc. ¿Qué enseña la Biblia?

25 DE JUNIO DE 2016 · 14:40

,

No cabe ninguna duda de que Dios creó a los seres humanos con la capacidad de elegir. La primera decisión que tomamos fue la de desobedecer el mandato del Creador (1) por obedecer a la muy atractiva sugerencia de Satanás (2).  Eva eligió y convenció a Adán de hacer lo mismo (3). La Biblia enseña que, a causa de la desobediencia al mandato divino,  la humanidad y toda la creación fueron sujetadas por Dios a la mentirosa vanidad y corrupción en las que está envuelta y de las que necesita ser liberada (4).

De allí en más vivimos debatiéndonos entre qué es bueno y qué malo (5)

El tema que iniciamos hoy es acerca de si esta capacidad humana de elegir es sinónimo de libertad; y si ayuda o perjudica a la hora de nuestra salvación o condenación eternas.

 

John MacArthur.

Del conocido escritor y predicador John MacArthur (6) transcribo al respecto, lo que sigue: 

“La elección o predestinación es el acto de Dios por el cual en el pasado eterno Él escogió a aquellos que habrían de ser salvos. La elección es incondicional, porque no depende de nada fuera de Dios, tal como las buenas obras o una fe prevista (7)

Esta doctrina es repetidamente enseñada en la Biblia, y es también demandada por nuestro conocimiento de Dios. Para empezar, debemos ver la evidencia bíblica.

La Biblia dice que antes de la salvación, toda persona está muerta en pecado – muerta espiritualmente (8). En ese estado de muerte, el pecador es totalmente incapaz de responder a cualquier estímulo espiritual y entonces incapaz de amar a Dios, obedecerle, o complacerle en cualquier manera. La Escritura dice que la mente de cada incrédulo es “enemistad contra Dios; porque no se sujetan a la ley de Dios, ni tampoco pueden; y los que viven según la carne no pueden agradar a Dios (9). Eso describe un estado total de desesperanza: muerte espiritual.

El efecto de todo esto es que ningún pecador puede dar el primer paso, en el proceso de la salvación. Esto es lo que Jesús quiso decir, cuando dijo:

 “Ninguno puede venir a mí, si el Padre que me envió no le trajere; y yo le resucitaré en el día postrero.” (10)

Es también por ello que la Biblia repetidamente reitera que la salvación es obra de Dios de manera completa. Consideremos estos pasajes:

• “Los gentiles, oyendo esto, se regocijaban y glorificaban la palabra del Señor, y creyeron todos los que estaban ordenados para vida eterna”. (11)

•  Lydia fue salva cuando “…el Señor abrió el corazón de ella para que estuviese atenta a lo que Pablo decía”. (12)

•  “Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos; y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó”. (13)

•  “Según nos escogió en él antes de la fundación del mundo, para que fuésemos santos y sin mancha delante de él, en amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio de Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad…En él asimismo tuvimos herencia, habiendo sido predestinados conforme al propósito del que hace todas las cosas según el designio de su voluntad”. (14)

• “Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don (regalo) de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe.” (15)

•  “Debemos dar siempre gracias a Dios (…) que os haya escogido desde el principio para salvación”. (16)

•  “Dios, quien nos salvó y llamó con llamamiento santo, no conforme a nuestras obras, sino según el propósito suyo y la gracia que nos fue dada en Cristo Jesús antes de los tiempos de los siglos”. (17)

Ocasionalmente alguien sugiere que la elección de Dios está basada en Su presciencia de ciertos eventos. Este argumento sugiere que Dios simplemente mira hacia el futuro para ver a quién va a creer, y escoge a aquellos que Él ve que lo van a escoger. 

Pero note que Pedro dice que los elegidos son escogidos “según la presciencia de Dios Padre”, (18) y Pablo: “Porque a los que de antes conoció, también los predestinó”. (19) 

Y si el conocimiento divino simplemente significa el conocimiento de Dios de lo que va a suceder anticipadamente, entonces esos argumentos no pueden tener nada de peso.

Además eso no es el significado bíblico de la “presciencia”. Cuando la Biblia habla de la presciencia de Dios, se refiere al establecimiento de Dios de una relación de amor con esa persona. La palabra “conocer”, tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento, se refiere a mucho más que solamente un conocimiento cognitivo de una persona. 

Tres pasajes claramente indican esto (20). Además,  Pedro dice que Cristo fue “destinado desde antes de la fundación del mundo”. (21)  ¡Ciertamente esto significa mucho más que Dios Padre solamente miró hacia el futuro para ver a Cristo!

Significa que el Hijo tenía una relación eterna y amorosa con Dios Padre. Lo mismo es verdad de los elegidos, los que son definidos por Dios como los que “antes conoció”. Eso significa que Él los conoció – los amó – antes de la fundación del mundo.

Si la decisión de Dios para con los elegidos es incondicional, ¿descarta esto la responsabilidad humana? Pablo pregunta y responde a esa misma pregunta cuando afirma que la decisión de los elegidos es un acto de misericordia. (22) 

Dejados por sí mismos, aun los elegidos persistirían en el pecado y serían perdidos, porque están tomados de la misma masa caída que el resto de la humanidad. Dios mismo es responsable por su salvación, pero no erradica la responsabilidad de aquellos que persisten en el pecado y son perdidos – porque lo hacen voluntariamente, y no bajo compulsión. Ellos son responsables por su pecado, no Dios.

La Biblia afirma la responsabilidad humana junto con la doctrina de la soberanía divina. Además, la oferta de la misericordia en el evangelio es extendida a todos por igual. Tanto en el AT como en el NT (23)  se llama al “que desea” ser salvo, y se manda a volverse a Dios, a arrepentirse y ser salvos (24). 

Está claro que Dios no desea que nadie perezca, sino que todos sean salvos (25). Finalmente, el Señor Jesús dice: “al que a mí viene, no le echo fuera” (26).

En resumen, podemos decir que Dios ha tenido una relación de amor especial con los elegidos desde la eternidad, y en la base de esa relación de amor los escogió para la salvación. 

La pregunta final de por qué Dios escogió a algunos para la salvación y dejó a otros en su estado pecaminoso, es una que nosotros, con nuestro conocimiento finito, no podemos contestar. 

Sí sabemos que los atributos de Dios siempre están en armonía perfecta unos con otros. Es así, porque la soberanía de Dios siempre opera en perfecta harmonía con Su bondad, amor, sabiduría, y justicia.”

Continuaremos con este importante tema la próxima semana, si el Señor lo permite.

-----------oooooooo0ooooooo--------

Notas

Ilustración: imbs.es

01.  Génesis 2:16, 17.

02.  Ibíd. 3:1-5.

03.  Ibíd. 3:6.

04.  Romanos 8:20, 21.

05.  Ibíd. 7: 15-25.

06.  Tomado de: http://restablecidos.com/2015/04/11/que-ensena-la-biblia-sobra-la-eleccion/  Todas las negritas en el texto son agregadas para dar énfasis. John MacArthur es un conocido apologeta bíblico contemporáneo, nacido en California (EE.UU.) el 19 de junio de 1939. 

07.  Romanos 9:16.

08.  Efesios 2: 1-3.

09.  Romanos 8:7, 8.

10.  Juan 6:44.

11.  Hechos 13:48.

12.  Ibíd. 16:14.

13.  Romanos 8:29, 30.

14.  Efesios 1:4-5, 11.

15.  Ibíd. 2:8, 9.

16.  2ª Tesalonicenses 2:13.

17.  2ª Timoteo 1:9.

18.  1ª Pedro 1:2.

19.  Romanos 8:29.

20.  Oseas 13:4-5; Amos 3:2; Romanos 11:2.

21.  1ª Pedro 1:20.

22.  Romanos 9:19, 20.

23.  Isaías 55:1; Apocalipsis 22:17.

24.  Isaías 45:22;  Hechos 17:30.

25.  1ª Timoteo 2:4; 2ª Pedro 3:9.

26.  Juan 6:37.

Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - Agentes de cambio - El libre albedrío ¿ayuda o complica?