Ana Mª Huck: que los creyentes abran sus casas

Presidenta de la Unión de Mujeres Evangélicas (UDME) y directora de la revista “Nosotras”, forma parte de la actual Junta de Evangelismo en Acción y es miembro de la Junta Permanente de Mi Esperanza. Sobre este último proyecto, y con el deseo de conocer más de él, es que le planteamos algunas cuestiones. Pregunta.- Es evidente todo el interés que está despertando ese gran proyecto evangelístico llamado Mi Esperanza. ¿Cómo debemos entenderlo? Respuesta.-¡Como una gran oportunidad que Dios nos brinda en España! Es muy significativo que más de 1.100 iglesias procedentes de las diversas familias denominacionales que conforman el abanico de iglesias evangélicas, se hayan comprometido con el proyecto Mi Esperanza (ME); seguramente algunas más se sumarán después del verano. Mi Esperanza es un proyecto que pretende movilizar a los creyentes para que abran sus casas como medio de testimonio y expresión del amor de Dios en torno a la emisión en televisión de tres programas con testimonios de alta calidad, en horario de máxima audiencia los próximos días 15, 16 y 17 de diciembre. El planteamiento del proyecto ME es muy sencillo y puede considerarse como una herramienta que beneficia no sólo a las iglesias involucradas, sino también bendice la Obra de Dios en general al reenfocar la prioridad de la misión que Jesucristo nos encomendó a todos: vivir y testificar del poder transformador del Evangelio en medio de nuestra necesitada sociedad, carente de fe, de esperanza y amor. El equipo de ME -la Junta Permanente, los Coordinadores regionales, el Consejo nacional, el Consejo asesor y las iglesias que se han involucrado- percibimos un gran anhelo por un cambio espiritual profundo dentro de nuestras respectivas iglesias. En las diferentes denominaciones hay un sentir de urgencia por una renovación -una revolución- de un mayor compromiso con Dios, la familia, la iglesia local y la sociedad. P.- ¿Se adecúa Mi Esperanza al panorama socio-religioso español? R.-Mi Esperanza no tiene una nacionalidad determinada, cada país lo adapta de acuerdo a su mejor criterio; el proyecto ya ha sido de gran bendición en más de 50 países, en diferentes continentes. ME se basa en el modelo bíblico de compartir nuestra fe con aquellos que nos rodean en la intimidad de nuestro hogar; sencillamente es el ABC del Evangelio. Compartir, con naturalidad y sencillez, nuestra experiencia personal con Jesucristo todavía es la herramienta más eficaz. Hoy más que nunca debemos tomar conciencia que la sociedad que nos rodea necesita “ver para creer”; demanda palpar la autenticidad de una fe firme y confiada, de una esperanza viva, en medio y a través de las más adversas circunstancias. La credibilidad de nuestro compromiso como dignos embajadores, luz, sal y levadura es desafiada continuamente, y el “ir contra corriente” nos emplaza a vivir un estilo de vida diferente que requiere coherencia espiritual y sensibilidad social. Proclamar esperanza en tiempos de apatía, frustración, desilusión y temor es la misión de la Iglesia, y de cada hijo de Dios. Quedarnos dentro de nuestras cuatro paredes resta vida y visión. Retomar y recuperar el impulso evangelizador en nuestras congregaciones nos ayudará también a revalorar y redefinir nuestro estilo de vida como testimonio vivo y creíble ante los que nos rodean y nos observan. P.- Si deseo ofrecer mi casa, ¿cómo debo prepararme? R.-ME está basado en los “Hogares Mateo”, por el ejemplo que dio Mateo al invitar a Jesús a su hogar en presencia de sus amigos y familiares. (Mateo 9:9). Si deseo que mi hogar sea un “Hogar Mateo” necesito orar para que Dios me muestre si mi hogar tiene un buen testimonio en el vecindario que haga creíble a Jesucristo como mi Salvador y Señor; necesito orar intensamente -y ayunar, ¿por qué no?- por las personas que deseo invitar; debo cultivar su amistad y estar atenta a sus necesidades e inquietudes. En definitiva, necesito verlos como Cristo los ve, con genuino amor y compasión. A través de las iglesias locales, los Hogares Mateo reciben un breve entrenamiento que ayudará a abrir nuestro hogar y facilitará el desarrollo del programa de la manera más efectiva. P.- Tengo entendido que se trabaja con las iglesias, ¿es una forma de movilizarlas, de modo que salgan de la comodidad? R.-Definitivamente las iglesias involucradas serán las primeras en recibir la bendición de que nuevas almas se incorporen a la comunidad. No todas están preparadas para ser “un granero”, y en no pocas han dejado de lado -o sustituido por una versión más “light”- la predicación del auténtico Evangelio que menciona el pecado, el arrepentimiento, el necesario cambio de naturaleza, y el progresivo discipulado, como parte de un proceso individual hacia la madurez espiritual. Las iglesias comprometidas verán el resultado de su intensificación en la oración y en el entrenamiento de sus miembros. Un renovado espíritu de fe, gozo y amor estimulará a todos aquellos que buscan primeramente el Reino de Dios y Su justicia. Y esa renovada fe se traducirá en acción, compromiso y vida. P.- Estamos insertos en una sociedad posmoderna, poscristiana y secularizada. ¿Tenéis sugerencias acerca de cómo romper estas barreras para atraer a nuestros amigos, familiares, vecinos… no creyentes? R.-El corazón humano tiene las mismas carencias y necesidades, aunque la mentalidad sea la de este siglo XXI. La cercanía y la sencillez son poderosas armas que siempre llegan al corazón. Dios nos puede capacitar con las palabras adecuadas para compartir nuestro testimonio, pero más que palabras, son nuestras acciones, gestos y amor lo que apela y llega. Hay innumerables maneras para demostrar nuestro interés genuino por las personas y sus circunstancias presentes; sólo hace falta tener carga por su futuro eterno. P.- Los líderes de las iglesias necesitarán movilizar a los miembros de sus congregaciones. Por lo que veo es todo un revulsivo… R.-Como en toda actividad que se realiza para la extensión del Reino de Dios, los líderes de las iglesias son los responsables de comunicar, inspirar, modelar y marcar las pautas en sus congregaciones. Seguramente reforzarán la oración, que es el poderoso motor de todo esfuerzo de evangelización. También debemos admitir que el enemigo no descansará al percibir que se acerca un tiempo de batalla por las almas; tratará de sembrar más cizaña, desacuerdos, y malos entendidos. Los líderes necesitarán más sensibilidad espiritual para discernir y evaluar, para animar y batallar sin temor junto a sus congregaciones. P.- Se habla ya de más de 1.000 iglesias implicadas. ¿Qué les diría a aquellas que están indecisas para que se sumen? R.-Que expongan en oración delante del Trono del Todopoderoso sus dudas y preguntas, y que permitan que el Espíritu Santo les revele la voluntad del Padre. Es posible que no todas las iglesias estén en condiciones para recibir y alimentar nuevas almas por situaciones internas no superadas, aunque para el Señor no hay circunstancias imposibles que no pueda, y quiera, corregir, sanar y santificar. P.- ¿Piensa que en España nos falta pasión para difundir las Buenas Noticias de salvación? R.-Personalmente creo que sí hay cierta pasión, preocupación y difusión de las buenas nuevas. Se proclama el Evangelio de la gracia desde los diversos medios de comunicación, y hay organizaciones que puntualmente realizan actividades, campañas y eventos de evangelización, pero, reconozcámoslo, no se observa el fruto de tanto trabajo y esfuerzo. Quizá la escasa cosecha desanima a unos, y justifica a otros. En general se observa un acomodo, un letargo, un cansancio, donde debería brotar vida y vida en abundancia. Los tiempos y los métodos de comunicación han cambiado, pero la misión y la vocación de la Iglesia, y de cada hijo de Dios, continúan inmutables. ¿Nos faltará gratitud, percepción y entrega por el gran regalo de la salvación, para transmitirlo con fervor y convicción? P.- ¿Cuál es el papel de las organizaciones de mujeres que participan en el mismo? Sé que están involucradas la UDME, AFEC, AGLOW, entre otras. R.-Mi Esperanza ya se ha realizado en 50 países, en distintos continentes, y por experiencia se ha llegado a la conclusión que las mujeres son la clave para este proyecto que está basado en los llamados “Hogares Mateo”. Suele ser la mujer la que determina qué actividades se realizan en la intimidad de su hogar, y haciéndola partícipe de este proyecto con información y formación, cientos de miles de hogares han experimentado el gozo de ser un instrumento de bendición para la honra y gloria de Dios y la salvación de almas. Las diversas organizaciones de mujeres evangélicas nos hemos sumado al proyecto ME, para cooperar en lo que consideramos prioritario como es la oración, que potenciará el impacto del proyecto y fortalecerá el testimonio de cada “Hogar Mateo”, además de apoyar a nuestras iglesias locales. P.- Mi Esperanza trajo a Ruth Conard, fundadora del ministerio “Diseñadas para ser pilares” y conocida escritora cristiana, para ofrecer una serie de conferencias destinadas a mujeres de diferentes iglesias implicadas en este proyecto. ¿Estima que este ciclo de charlas fue positivo para animar a este colectivo a participar activamente? R.-Ruth Conard es la esposa de Guillermo Conard, vicepresidente internacional de la Asociación Billy Graham. Ha participado en ME en varios países, en distintos continentes. Por su dilatada experiencia en la vida cristiana, en su ministerio personal y su vocación misionera, Ruth nos compartió vivencias y consejos acerca de cómo involucrarnos en los Hogares Mateo. Su amor y compasión por las almas saturaron sus charlas, sazonadas además, con humor y sensibilidad espiritual. Tuvimos buenas reuniones en Valencia, Barcelona, Madrid, Málaga, Sevilla y Marín (Pontevedra). La gira con Ruth, auspiciada por ME, la Unión de Mujeres Evangélicas (UDME) y AGLOW, fue un evento histórico, ya que por primera vez contamos también con el apoyo y la colaboración de las distintas organizaciones y retiros de mujeres como AFEC, CEFA, FIEIDE, LTB, REMUGA y UMMBE. Para más información acerca de Mi Esperanza-España, vídeos, motivos de oración, testimonio, el próximo concierto de Hillsong Australia que apoya el proyecto ME, vigilias de oración, etc., recomiendo la página web: www.miesperanza.es que se actualiza cada dos semanas.