Trump defiende una fe presente en la vida pública en el Desayuno de Oración

Representantes políticos, líderes y empresarios de Estados Unidos y otros países participaron el pasado jueves del tradicional Desayuno Nacional de Oración.

Más de 3.500 asistentes asistieron al Washington Hilton para el evento, entre ellos, el presidente Donald Trump y varios miembros del Congreso.

La participación de Trump viene precedida de las diversas tensiones políticas que se están viviendo en Estados Unidos en torno a los acuerdos pendientes sobre inmigración.

Recientemente, un grupo de pastores y líderes evangélicos de todo el país han firmado una carta solicitando al Gobierno que tome la iniciativa para proteger a los jóvenes dreamers -cuyos permisos de residencia caducarían en poco tiempo si no se llega a un acuerdo-, así como que se vuelvan a abrir las puertas para la llegada de refugiados, que han marcado el mínimo histórico durante el gobierno de Trump.

DERECHOS INALIENABES

En su discurso, Donald Trump hizo hincapié en la importancia de la libertad religiosa y recordó a los presentes que Estados Unidos es “una nación bajo Dios (o por la gracia de Dios)”.

“Nuestros derechos no nos los da el hombre. Nuestros derechos provienen de nuestro Creador. Ninguna fuerza terrenal puede quitar esos derechos, no importa de donde proceda”, dijo Trump a la audiencia.

“Cuando los estadounidenses pueden vivir según sus convicciones, hablar abiertamente de su fe y enseñar a sus hijos lo que es correcto, nuestras familias prosperan, nuestras comunidades florecen y nuestra nación puede lograr todo”, dijo.

SCALISE: LA FE ES ESENCIAL

El congresista Steve Scalise (republicano de Los Ángeles), que sobrevivió por poco a un ataque armado durante un partido de béisbol, tuvo a su cargo uno de los discursos durante en el evento. Scalise destacó la ayuda de Dios en este trance. “Definitivamente, soy un ejemplo vivo de que los milagros realmente suceden”, expresó.

Durante su discurso del Desayuno Nacional de Oración, Scalise nuevamente señaló a Dios una y otra vez, en su propia historia de supervivencia, así como en las referencias al gobierno estadounidense.

“Esta fue una nación fundada con una profunda creencia en Dios”, dijo Scalise, señalando la forma en la que los Padres Fundadores hablaron sobre la fe y Dios cuando establecieron la nueva nación.

“No se puede separar la Iglesia del Estado”, continuó Scalise. “Esta idea de que podrías dejar tu fe en la puerta... la fe es parte de lo que eres, es parte de lo que soy”.

Este año también destacó la participación musical de Matthew West, que interpretó su éxito “Grace Wins” (la gracia vence).

El evento de oración del jueves fue organizado por la Fellowship Foundation, una organización religiosa sin fines de lucro que busca reunir a líderes políticos, religiosos y empresariales.

TODOS LOS PRESIDENTES

El Desayuno Nacional de Oración es un evento que agrupa una serie de reuniones y tiempos de comida durante todo el día, diseñados para construir relaciones. Todos los presidentes, desde Dwight Eisenhower, han hablado en el evento de oración.

En el evento principal, el desayuno de la mañana, generalmente cuenta con dos oradores, incluido el presidente y un invitado especial. Los oradores de otros años han sido la Madre Teresa, el cantante Bono o el ex presidente español José Luis Rodríguez Zapatero.

Esta actividad comenzó en el año 1953 cuando los miembros del Congreso invitaron al presidente Eisenhower a unirse a ellos para un desayuno de confraternidad “en el espíritu de Jesús”. El desayuno ha continuado cada año, organizado y dirigido por miembros de los grupos de oración en el Senado de los Estados Unidos y la Cámara de Representantes de los Estados Unidos.