Evangélicos, Europa y el matrimonio gay

La bandera arco iris cubriendo edificios emblemáticos como la Casa Blanca, filtros especiales para imágenes de perfil en Facebook, periódicos cambiando su logotipo en apoyo a la comunidad LGBT, y muchos líderes evangélicos en EE.UU. expresando reacciones de forma contundente. Este es el panorama que se presenta tras la decisión del Supremo en Estados Unidos de permitir el matrimonio homosexual, generando un debate que ha traspasado fronteras.

Mientras tanto, en Europa, los evangélicos ven el debate en los Estados Unidos desde la distancia. Aquí, varios países de la Unión Europea aprobaron leyes en el pasado para institucionalizar las uniones del mismo sexo, e incluso algunas iglesias protestantes han cambiado de opinión al respecto.

Dos ejemplos recientes de este cambio dentro protestantismo liberal europeo son la decisión de las iglesias luteranas y reformadas francesas de “bendecir los matrimonios homosexuales”, o la votación a favor de homosexuales en el pastorado de la Iglesia Protestante Unida de Bélgica. Los evangélicos de ambos países reaccionaron defendiendo una visión bíblica del matrimonio (vea Francia y Bélgica).

Con esto en mente, ¿pueden los evangélicos europeos ofrecer una perspectiva diferente en el debate en Estados Unidos?

Evangelical Focus contactó con líderes en Suiza, Francia y en el ámbito europeo, para conocer su opinión.

 

SUIZA: “EN UN ESTADO PLURALISTA LAS PERSONAS NO SE GUÍAN POR LA TEOLOGÍA BÍBLICA”

 

 “Para ser honesto, no estoy seguro de lo que los evangélicos en los EE.UU. podrían aprender de nosotros. En Europa en realidad no hemos conseguido dar una respuesta convincente y competente de por qué es legítimo dar un estatus especial al matrimonio entre hombre y mujer, en comparación con otras uniones”, dice Marc Jost, político y secretario general de la Alianza Evangélica en Suiza.

“Tal vez lo que estamos haciendo un poco mejor aquí es que los homosexuales son abordados con estima y respeto, a pesar de que puede que no compartan las mismas opiniones sobre la ética sexual”, afirma Jost.

El suizo ve una diferencia entre la aceptación de la homosexualidad en un nivel estatal y la bendición de las uniones homosexuales dentro de las iglesias. “La mayoría de la gente en un Estado pluralista no seguirá una forma de pensar que está conformada por la teología bíblica. Si no hay suficientes razones presentadas para pensar de otra manera, la mayoría de la gente no ve razones para dar privilegios a los matrimonios heterosexuales sobre las uniones homosexuales”.

Sin embargo, “las iglesias evangélicas deben de esperar orientarse por la ética bíblica. Así que la Alianza Evangélica tiene el argumento teológico para demostrar que el lugar legítimo de la sexualidad es el matrimonio entre un hombre y una mujer. Y la Iglesia hace lo correcto cuando se bendice este tipo de unión, y no otras”.

 

FRANCIA: “ACEPTAMOS LAS LEYES PORQUE ACEPTAMOS LA DEMOCRACIA"

 

 Clément Diedrichs, director de CNEF (Consejo Nacional de Evangélicos de Francia) tiene una opinión similar: “No estoy seguro de si somos capaces de ayudar a los evangélicos en los EE.UU., nuestra cultura es tan diferente", comenta.

“Pero lo que podemos decirles es que nuestra misión es predicar el evangelio. Nuestra misión no es que nuestra sociedad esté de acuerdo con nosotros. Tenemos que aceptar las diferencias y ser testigos de Cristo en cualquier tipo de sociedad. Cuando uno envía misioneros a la India, sabe que esa sociedad no estará de acuerdo con el pensamiento cristiano. Así que tenemos que aceptar esto en nuestros países, también. Incluso Jesús sabía que no todo el mundo lo aceptaría”.

Diedrichs piensa que el enfrentamiento frontal contra la administración del Estado no es la solución. “No queremos ser conocidos como cristianos que luchan con el gobierno cada vez que las leyes no están de acuerdo con la Biblia. Tenemos que aceptar las leyes porque aceptamos que estamos en una democracia”.

Los cristianos deben trabajar para leyes justas, “esto es lo que hicimos en Francia hace 2 años. Pero después, tenemos que seguir siendo cristianos en nuestra sociedad. Si mantenemos la queja no somos personas de buenas noticias”.

Dierdrichs hace referencia al libro de Eclesiastés, en la Biblia: “Hay un momento para luchar, y un momento para dejar de luchar y simplemente ser cristianos. Pero el Señor nunca dijo que vamos a sentirnos a gusto en la sociedad, así que tenemos que aceptarlo”.

Por otra parte los cristianos deben tener “abogados, personas competentes, que luchan por la libertad de conciencia y la libertad de expresión, que es un asunto prioritario para nosotros”.

 

PROTESTANTES QUE NO RESPETAN LA ESCRITURA, “UN DESASTRE”

Al comentar sobre el cambio en el debate sobre el “matrimonio gay” dentro de las iglesias protestantes, la CNEF tiene una posición clara: “El gobierno es laico, y toma decisiones sin trasfondo religioso. No pueden decir: tomamos una decisión porque los cristianos están pidiendo algo. Pero con el EPUB (un ejemplo de los que aceptan el 'matrimonio gay' dentro de una Iglesia Protestante) es diferente. Se los reconoce como hermanos en Cristo, por lo que es una situación totalmente diferente. Cuando una denominación cristiana no está respetando las Escrituras, esto afecta a la imagen de todos los cristianos, se convierte en un desastre para nuestra imagen como protestantes en el mundo francés”.

Esta es la razón por la que la CNEF ha sido mucho más contundente cuando el matrimonio se ha redefinido en el interior de las iglesias.

 

ALIANZA EUROPEA: “AMBAS PARTES DEBEN RESPETAR LA SEPARACIÓN DE IGLESIA Y ESTADO”

 

 “Vivimos en un mundo secular. La perspectiva de evangélicos y otras entidades religiosas afines se ha convertido en un punto de vista minoritario. La cristiandad no está de moda. Esto es algo que tenemos que aceptar y nuestras respuestas tienen que tener esto en mente”, afirma Thomas Bucher, secretario general de la Alianza Evangélica Europea.

Pero esto no significa que uno simplemente debe “renunciar” a sus derechos. Los evangélicos “necesitan abordar el tema y dar a conocer lo que realmente significa. Las dificultades comienzan cuando el Estado comienza a inmiscuirse en la esfera religiosa”, continúa Bucher.

“La separación del Estado y la Iglesia tiene que ser respetada por ambos lados. Tiene mucho que ver con la libertad de conciencia, pensamiento, creencia y religión. Es preocupante si tener una opinión diferente sobre la sexualidad está siendo criminalizado (el discurso del odio, las acusaciones de homofobia, etc.)”.

 

DIÁLOGO PARA GARANTIZAR LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN

¿Dónde y cómo deben los cristianos defender su posición bíblica? “En una democracia la mayoría hace la legislación. El Estado puede, por tanto, permitir casarse a quienes les esté permitido hacerlo”, explica el representante de la EEA. “Sin embargo, no se debe obligar a las iglesias a hacerlo”.

“Algunas iglesias han optado por aplicar lo que hace el Estado. Pero el Estado no debe interferir en los asuntos de la iglesia. Tener un diálogo al respecto es completamente diferente. La Iglesia debe elevar su voz y hacer lo que mantiene bajo su creencia sobre el matrimonio cristiano, sin tener que temer ser perseguido por ello”, concreta Bucher.

“También nos preocupa que las personas tengan libertad de conciencia con respecto al tema del matrimonio homosexual. Si alguien no quiere suministrar servicios como impresión, fotografía, comida, etc, para una misma celebración del matrimonio homosexual, debe tener la libertad de declinar respetuosamente el trabajo”, concluye Bucher.