63 mujeres escapan del secuestro de Boko Haram

La mayoría de las mujeres secuestradas hace dos semanas por el grupo extremista islámico Boko Haram han conseguido escapar, según informan este lunes fuentes locales. Un total de 63 mujeres recuperaron su libertad tras escapar de sus captores. Al parecer, el grupo de mujeres aprovechó el descontrol que se produjo en el campamento donde estaban retenidas ante un ataque que el grupo islámico realizó el viernes sobre bases militares nigerianas. Hace dos semanas, setenta mujeres fueron secuestradas en el pueblo de Kummabza, en el estado de Borno, cerca de Chibok, donde se produjo el secuestro de más de 200 chicas hace algo más de dos meses. Las autoridades locales iniciaron entonces una investigación, comprobando que muchas mujeres habían sido secuestradas en una oleada de ataques perpetrada por el grupo terrorista. El gobierno local está acusando al gobierno federal de no tomar las medidas necesarias para combatir a Boko Haram, que cuenta con un fuerte despliegue y armamento. Las mujeres que escaparon han regresado con sus familias. “Todavía creemos que siete mujeres siguen retenidas en el campamento, o tal vez algo peor les ha sucedido”, comentaba Adamu Suleiman, miembro de un grupo de vigilancia de la zona. “No tenemos los detalles de su escape todavía, pero creemos que Dios les dio la oportunidad en el momento que los insurgentes se desplazaron para atacar Damboa, el viernes”. LAS CHICAS DE CHIBOK SIGUEN DESAPARECIDAS Más de 200 menores permanecen secuestradas por Boko Haram desde el pasado 14 de abril. Las últimas novedades sobre este caso tienen que ver con la detención por parte de las autoridades nigerianas de un líder de Boko Haram que ha mostrado disposición a colaborar con los militares en la localización de las chicas. La situación de tensión continúa en Nigeria, dado que Boko Haram no ha dejado de asesinar y atacar diversos objetivos en los últimos meses, sobre todo cristianos. La Alianza Evangélica Española ha expresado su malestar ante esta situación, pidiendo al Gobierno y otras entidades internacionales que intervengan para detener el "genocidio" al que está siendo sometida la población cristiana del norte de Nigeria.