Marruecos intenta cerrar puertas al extremismo islámico

El Gabinete Real de Marruecos ha aprobado un plan para modernizar el campo religioso y preservar el Islam marroquí de interpretaciones extremistas, según declaraciones del ministro de Asuntos Islámicos, Ahmed Taufiq, recogidas por la agencia Efe. Taufiq ha destacado la importancia del islam en la sociedad marroquí y enfatizó que el plan desarrolla servicios para que las personas puedan desarrollar la religión - solo la islámica malekita - en “condiciones óptimas”. SIN LIBERTAD RELIGIOSA El reino del Norte de África no ha realizado avances significativos con respecto a una auténtica libertad religiosa. El proselitismo está prohibido, y recientemente un cristiano local, Mohamed El Baladi, tuvo que pasar por la cárcel durante quince días y un juicio - del que finalmente salió absuelto - en el que se le acusaba de abandonar la fe islámica y de hacer tambalear la fe de otros. Desde organizaciones de derechos humanos se apoyó la defensa de Baladi, reclamando que el país se abriese a la libertad religiosa y de conciencia que en estos momentos sus ciudadanos no pueden disfrutar. En el año 2010, Marruecos expulsó a todos los misioneros protestantes extranjeros. Aunque algunos consiguieron negociar su visado para regresar al país, muchos son los que todavía tienen prohibida su entrada al reino. CONTROL DE LOS PREDICACORES Y EDUCADORES Con este nuevo plan, el Islam marroquí procurará cerrar filas aún más a su entendimiento religioso, aunque en este caso para protegerse de otras tendencias islámicas. En Marruecos desempeña un papel importante la institución del Comendador de los Creyentes, que ostenta el monarca, una institución religiosa propia del contexto marroquí. En un comunicado, el Gabinete Real informó de que el rey Mohamed VI presidió la ceremonia de presentación del plan, elaborado por el Consejo Superior de Ulemas y el Ministerio de Asuntos Islámicos, en el que se introducen nuevas tecnologías en el ámbito religioso. El plan ofrece asesoría a los imanes-tutores para ayudarles en el cumplimiento de su misión religiosa y a ampliar y mejorar el programa de lucha contra el analfabetismo que realizan las mezquitas. Un total de 1.300 imanes licenciados, que han memorizado el Corán y han recibido una formación complementaria en Teología y otras materias, serán los encargados de asegurar la formación religiosa en las diferentes mezquitas del país.