Muere en el exilio, por ser evangélico, indígena de Chiapas

El indígena evangélico Herminio Sánchez Gómez, de 83 años de edad, quien junto con otros 40 compañeros fue expulsado en junio del año pasado de la comunidad de Yashtinín, municipio de San Cristóbal por católicos tradicionalistas, falleció en esa ciudad, donde estaba viviendo como refugiado. El anciano murió el martes pasado en las instalaciones del DIF municipal de San Cristóbal, donde pasó los últimos siete meses de su vida en calidad de desplazado tras tener que abandonar a la fuerza su comunidad por las amenazas de los católicos tradicionalistas, junto con otros 40 indígenas protestantes. Sánchez Gómez “murió con el deseo de regresar a su comunidad –ubicada a 20 kilómetros de la ciudad en la que residía como refugiado--, pero los tradicionalistas que lo obligaron a salir el 14 de junio no se lo permitieron”, comentó en entrevista el pastor Esdras Alonso González. No fue posible porque a principios del pasado mes de septiembre la asamblea local de Yashtinín, dominada por los tradicionalistas, decidió no permitir su retorno para “mantener la paz y la armonía en el ejido”. El pastor evangélico agregó que el indígena protestante fue velado en las instalaciones del DIF, donde falleció y donde vivía junto con los otros 40 expulsados por intolerancia religiosa, siendo luego sepultado en esa misma ciudad.