Identidad y liderazgo auténtico para una misión global

Lindsay Brown, director internacional del Movimiento Lausana, en Madrid: “Tenemos el problema de pensar que sólo podemos ser moralmente distintos si nos apartamos de la sociedad”.

Joel Forster

MADRID · 30 DE NOVIEMBRE DE 2015 · 18:18

Lindsay Brown, durante el encuentro anual de Lausana en España. / Jacqueline Alencar.,lindsay brown, lausanne, lausana, españa, 2015
Lindsay Brown, durante el encuentro anual de Lausana en España. / Jacqueline Alencar.

En el siglo XXI, la misión avanza a través de redes de personas de trasfondos diferentes, con una identidad bíblica en común, rehuyendo los ‘personalismos’ para trabajar en campos muy diferentes con el objetivo de llevar las buenas noticias a todas las personas.

Este tipo de “testimonio” es el que el encuentro anual del Movimiento Lausana en España enfatizó el pasado sábado 28 de noviembre. Reflexión, formación y debate fueron de nuevo las dinámicas que reunieron esta vez a unas 50 personas en Madrid. Algunos repiten desde que empezaron este tipo de ecuentros hace cinco años, otros se acercaron a escuchar y opinar por primera vez.

 

UN LIDERAZGO AUTÉNTICO

El Movimiento Lausana, impulsado en los años 70 por John Stott, Billy Graham y otras personas clave como Samuel Escobar o René Padilla, “no es una organización, no hay membresía; la gente está unida por una visión conjunta”, explicó el galés Lindsay Brown, su director internacional, que viajó a Madrid para acompañar a los participantes.

 

Lindsay Brown. / J.A.

La red mundial busca empujar a quienes “ya trabajan y lideran organizaciones, ponerlos en contacto”. En lugar de “controlar las iniciativas que surgen”, se quiere poner estos proyectos en manos de las personas, aunque esto signifique que “los frutos de Lausana crezcan a menudo en otros árboles”, admitió Brown.

El nuevo lema de Lausana es “vincular personas e ideas de influencia para la misión mundial”.

El mundo necesita un liderazgo cristiano auténtico y honesto, defendió Brown, el tipo de líder que “se alegra cuando el evangelio avanza, dándole igual quién está en la plataforma (…) Un tipo de líder que no habla de sí mismo, habla de los ministerios de otros, y no le importa estar detrás”. Este además es, observó, “el tipo de líderes que atrae a los jóvenes de esta generación”.

 

¿CÓMO SE ORGANIZA?

El trabajo del Movimiento Lausana se ha fortalecido tras el congreso mundial de Ciudad del Cabo 2010, y se organiza en consultas globales (“Global Consultations”) y conferencias regionales sobre los retos que se dan en cada contexto cultural.

Uno de los siguientes encuentros en Europa (Italia, en 2017), por ejemplo, tratará el problema del nominalismo cristiano y la forma en la que el continente será reevangelizado.

 

‘CONTADORES DE HISTORIAS’, MAESTROS Y VISIONARIOS

La identidad de Lausana, como la de cualquier movimiento, enfatizó Brown citando a Samuel Escobar, funcionará en la medida en la que se coordinen tres tipos de personas: “contadores de historias (en inglés ‘story-tellers’, que miran a la Historia), maestros (aportan los valores) y profetas/visionarios (miran hacia el futuro)”.

Con esto en mente, las iglesias deben ser luz y sal. “La Biblia no nos da base para separarnos de la sociedad. Tenemos un problema si pensamos que sólo podemos ser moralmente distintos si nos apartamos de la sociedad”. Hay que “penetrar la sociedad” en la que los cristianos se encuentran.

 

RESPUESTAS A LAS PREGUNTAS DE NUESTRA SOCIEDAD

Los retos cambian conforme cambia la sociedad. Temas que en la gran conferencia de Misión del Cabo se trataron poco, ahora pueden haberse convertido en centrales. Brown resumió en 12 los desafíos de la iglesia en estos momentos: “Islam, los no alcanzados, las ciudades, la teología de la prosperidad, el cuidado de la creación, las identidad y etnias, la siguiente generación, la tolerancia y libertad religiosa y el pluralismo, la diáspora, la sexualidad y el evangelio, la reevangelización y el nominalismos, y la verdad en la esfera pública”.

La ‘armas’ para afrontar estos temas, dijo Brown citando a K.S. Latourette, deberían ser “la oración, la evangelización, el ejemplo, la acción, el argumento y el sufrimiento”.

Brown reconoció que, demasiadas veces, los evangélicos “luchamos batallas de hace 10 años, cuando tenemos nuevas batallas delante de nuestra cara que no hemos identificado”.

 

Foto final con la mayoría de asistentes a la reunión anual de Lausa España. / J.A.

“El éxito del cristianismo frente al paganismo fue siempre cuando no sólo los argumentos de los creyentes eran mejores, sino también sus vidas”, dijo. Además, las minorías cristianas pueden transformar profundamente una sociedad, tal como concluye el sociólogo Robert Bellah: “La calidad de nuestra cultura puede cambiar si sólo el 2% de la población comparte una visión en común.”

¿Por dónde empezar? Según John Stott compartía poco antes de morir, en la Europa del siglo XXI “las personas buscan, sobre todo, significado personal, comunidad y trascendencia”. “El evangelio”, decía el fallecido teólogo inglés, “tiene respuestas para las tres necesidades”.

 

LA PALABRA COMO BASE DE UNA IDENTIDAD CLARA

Con ejemplos de países concretos habló también de los riesgos para la iglesia en estos momentos. Perder la libertad religiosa en Europa es uno. Otro, la teología de la prosperidad, sobre la que a menudo no se explica que pese a su aparente crecimiento, “salen de ese tipo de iglesias más gente por la puerta de atrás que las que entran por la puerta de delante: personas que tras 2-3 años en una iglesia así, salen heridas y  mayoritariamente ya no volverán a entrar en una iglesia evangélica”.

La autoridad de la Biblia como Palabra de Dios evitará caer en estas teologías, o en las doctrinas liberales. Por ello, Brown insistió que Lausana no debería renunciar nunca a su identidad “claramente evangélica”.

Por eso se necesita en parte una buena reflexión teológica, literatura y otros materiales que generen discusiones en todos los niveles de la Iglesia, especialmente en las iglesias locales.

 

¿UN DOCUMENTO CLAVE PARA LA HISTORIA DE LA IGLESIA?

Brown se atrevió a pronosticar que el “Compromiso de Ciudad del Cabo 2010” “será visto históricamente como uno de los grandes documentos de la Iglesia”.

En la redacción de su parte inicial participaron 18 teólogos de todo el mundo (resumieron los fundamentos doctrinales históricos de la fe cristiana), mientras que la segunda parte (“Llamada a la acción”) se basó en las inquietudes y propuestas de los 4.500 representantes evangélicos de 198 países que participaron en el congreso en Sudáfrica.

 

RELACIONES PERSONALES Y DISCUSIÓN EN GRUPOS

 

Uno de los grupos pequeños, por la tarde. / J.A.

En la pausa de la comida, los participantes tuvieron tiempo para comentar y digerir las ideas lanzadas por la mañana. Ya por la tarde, se formaron 8 grupos de discusión, por temas de interés. 

Se habló en pequeños grupos de: La verdad y la persona de Cristo, La verdad y el desafío del pluralismo, La verdad y los medios de comunicación globalizados, La verdad y las artes en la misión, La Paz de Cristo para los pobres y oprimidos, La paz de Cristo para su creación sufriente, La Educación Teológica en la misión y Plantación de Iglesias.

 

IDEAS YA EN MARCHA

De estas dinámicas en años anteriores han surgido en España varios proyectos interesantes, tal como se dio a conocer en pequeños informes. Se han impulsado publicaciones producidas desde el país, dirigidas a compartir visión a las iglesias locales, para trabajar como se aplica la misión en ámbitos sociales muy concretos (trata de seres humanos, jóvenes, artes, y un largo etc).

 

Otro de los grupos. / J.A.

Se está colaborando con facultades teológicas para ofrecer el Compromiso de Ciudad del Cabo como un texto base a debatir. También funciona una red de plantadores de iglesias de denominaciones evangélicas distintas, con la visión de establecer unos objetivos comunes para el futuro. Se trabaja a su vez en documentos que reflexionen sobre los valores misionales aplicados al entorno del Derecho y la legislación internacional, y se promueven nuevas iniciativas apologéticas.

Para seguir fomentando el trabajo en red y las conversaciones personales, el encuentro del año 2016 podría ampliarse a dos días de duración. Será, de nuevo, el último fin de semana de noviembre.

Puede visitar el blog del movimiento Lausana en España, su perfil de Facebook; o visitar la web del movimiento a nivel global

Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - ESPAÑA - Identidad y liderazgo auténtico para una misión global