España, ¿Estado aconfesional?

La misa católica celebrada este lunes por las víctimas del vuelo de Germanwings tuvo a continuación una participación evangélica y de otras minorías. “Marginal y humillante”, dice Ferede; “una vergüenza”, opina Jaume Llenas.

Redacción PD , Daniel Hofkamp

BARCELONA · 28 DE ABRIL DE 2015 · 11:47

Representantes de las confesiones judía, evangélica y musulmana, en el funeral de Estado. / EFE,
Representantes de las confesiones judía, evangélica y musulmana, en el funeral de Estado. / EFE

El funeral de Estado celebrado en España por las víctimas del vuelo de la compañía aérea Germanwings consistió en una misa católica en la que, al finalizar, se dio lugar a la participación de tres representantes de las confesiones evangélica, judía y musulmana.

Una ceremonia precedida de polémica tras la insistencia del cardenal Lluís Martínez Sistach en celebrar una misa, y no un acto multirreligioso -como en Alemania- o laico con participaciones de las confesiones religiosas mayoritarias -como en Francia-.

Como expresa el periodista Juan G. Bedoya en un artículo publicado este martes en el diario El País, “se ha llamado a esta misa un funeral de Estado. No es correcto. Ha sido un funeral católico, eucaristía incluida, en el que un cardenal católico (...) ha permitido hablar brevemente a dirigentes de otras tres confesiones, como en otras misas accede a que tomen la palabra fieles que leen el Evangelio o plegarias previamente pactadas”.

Apunta Bedoya a que “un Estado auténticamente laico debería organizar en estos casos ceremonias civiles, oficiadas en espacios civiles, inclusivas y al margen de las creencias particulares de cada fallecido o de sus familiares, quienes podrán organizar antes o después el funeral religioso, o no, que cada cual tenga por conveniente realizar. Quiso legislar al respecto, con este criterio, el Gobierno Zapatero, con una redacción novedosa de la Ley Orgánica de Libertad Religiosa, de 1980, pero se arrugó por presiones de los obispos a cambio de una paz religiosa siempre cuestionada”.

 

J. LLENAS: "EL ESTADO NO TIENE UNA CREENCIA"

En el ámbito evangélico, las reacciones han sido asimismo contundentes. Desde la Alianza Evangélica Española, su secretario general Jaume Llenas expresaba su decepción con la falta de desarrollo de la aconfesionalidad del Estado. “Se trata de una ceremonia de Estado y el Estado es aconfesional. El Estado no tiene una creencia como tal, la tienen los ciudadanos en particular. Las creencias, la espiritualidad, es algo de las personas, no de los Estados”, expresa Llenas en el artículo publicado en Protestante Digital.

La celebración de una misa ha sorprendido a los evangélicos europeos, tal y como contaba Thomas Bucher, secretario de la Alianza Evangélica Europea. “Esperábamos más respeto hacia las personas que murieron en el accidente de Germanwings y hacia las familias de las víctimas no católicas”, ha decía el máximo representante de la EEA. “Muchas de estas personas no eran de trasfondo católico, y creemos que habrían merecido un memorial más respetuoso con su cosmovisión”, ha añadido.

 

FEREDE: "ESTABLEZCAN UN PROTOCOLO PARA TODOS LOS ACTOS DE ESTADO"

Tras celebrarse el acto, la federación evangélica, Ferede, ha enviado una carta a la Vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, en la que su secretario general Mariano Blázquez expresaba nuevamente su decepción ante la “dejación de responsabilidad” por parte de las autoridades en la organización de un acto que considera “contrario al espíritu y la letra de nuestra Constitución que, desde distintos sectores de la sociedad, venimos denunciando cada vez que se produce un hecho similar”.

En la misiva se acusa al Gobierno de que se celebrara una misa porque “es al Gobierno -y no a ninguna confesión religiosa particular-a quien corresponde y compete la organización de un funeral de Estado que represente al conjunto de los ciudadanos españoles”.

Asimismo considera la participación de las minorías “marginal y humillante”. “La concesión indulgente, por parte del Cardenal arzobispo, a que las minorías tengamos una participación marginal una vez finalizada la misa, supone una humillación inaceptable que nos sitúa ante la disyuntiva de tener que rechazarla por indigna, o aceptarla por deferencia a las víctimas y a sus familiares”. Ferede espera “que sea la última vez que se nos obligue a afrontar esa disyuntiva”, y para ello vuelve a pedir un protocolo oficial para los actos de Estado.

“Pedimos a su Gobierno un compromiso real y efectivo con la aconfesionalidad constitucional y que se establezca, de una vez por todas, un protocolo para todos los actos de Estado, con arreglo a los principios de libertad, igualdad y neutralidad religiosa”.

 

PARTICIPACIÓN EVANGÉLICA A CARGO DE GUILLEM CORREA

La participación evangélica en el funeral de Estado, tras celebrarse la misa católica, estuvo a cargo del pastor y secretario general del Consejo Evangélico de Cataluña, Guillem Correa.

En sus cinco minutos de intervención, Correa hizo énfasis en el consuelo. “Ante una tragedia como la que hemos vivido, parece que el tiempo se detiene en nuestro desconsuelo. Por esa razón Jesús nos dejó las palabras: Venid a mí todos los que estáis cansado y agobiados, y yo os haré descansar. Cuando parece que no hay descanso para nuestro dolor, Jesús nos da consuelo”, expresó el pastor.

“Busquemos el consuelo en el amor de quienes nos aman, busquemos el consuelo en Jesús, autor y dador de la fe. En Jesús hay vida, en Jesús hay resurrección, tal y como enseña Pablo, Dios nos consuela en todos nuestros sufrimientos, para que nosotros podamos consolar a los que sufren, dándoles el mismo consuelo que Cristo nos da”, concluyó Correa.

La intervención de Correa, del 1:11:00-1.15:50.

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