´Crónicas Ibéricas´ rescata la figura de G. Borrow, el `vendedor de biblias del siglo XIX´

Han pasado 170 años desde que el vendedor de biblias inglés George Borrow cruzara España a caballo. Los escenarios, personajes y aventuras de su viaje quedaron fijados en su libro La Biblia en España, un clásico que se convirtió en best seller al aparecer publicado en 1843. Al leerlo, David Fernández de Castro se dio cuenta que, en España, las diferencias, los debates allí apuntados continúan sin resolverse satisfactoriamente. Para corroborar qué queda del país que Borrow conoció, decidió seguir los pasos del aventurero inglés. El viaje, con la inestimable ayuda de varios amigos «borrovianos», lo llevaría de Santiago de Compostela a Cádiz, de los naufragios de la Costa da Morte a la batalla de Trafalgar, pasando por una trampa etílica en Bembibre, una profetisa manchega, los gitanos de Badajoz y la caza del lobo en Almaraz. VISITANDO A PROTESTANTES DE HOY El enfoque es definitivamente sobre la España de hoy y el autor honestamente pone de manifiesto su propio trasfondo de escritor secular. Pero entre sus contactos con los «borrovianos» incluye al británico Ken Barrett, obrero a tiempo completo entre las Asambleas de Hermanos en España desde hace más de 20 años. La descripción de la visita a la casa de un «pastor protestante» y los temores que la anticipación despierta para David y su compañera es uno de los toques lacónicos de humor que hace el libro refrescante y esperanzador entre este género de viajes tierra adentro en nuestra península. ´Tras los pasos de George Borrow, vendedor de biblias en el siglo XIX´ ha sido publicado por la editorial Altaïr, y puede adquirirse por el precio de 15 euros. EL AUTOR David Fernández de Castro (Londres,1969) trabaja en el campo audiovisual. Es guionista y acaba de dirigir su primer documental, Herbolarium (2008). Tras leer el libro de George Borrow La Biblia en España sintió la imperiosa necesidad de revivir el épico viaje descrito en él. David Fernández de Castro, que, a diferencia del escritor inglés, se define como nadador mediocre, pésimo boxeador y peor jinete, trató de emular al vendedor de biblias y autor decimonónico, y recorrió España de norte a sur. También ingresó en la George Borrow Society, donde tiene el involuntario mérito de ser, con diferencia, su miembro más joven. Crónicas ibéricas es su primer libro.