Galdón el último

Entendió que debía hacer todo lo posible por ocupar el último lugar.

12 DE JULIO DE 2018 · 20:50

Entendió que debía hacer todo lo posible por ocupar el último lugar. / Pixabay.,
Entendió que debía hacer todo lo posible por ocupar el último lugar. / Pixabay.

El sermón dominical referido al texto de los evangelios que declara “los últimos serán los primeros” caló en lo más hondo de la conciencia de Galdón.

Entendió que debía hacer todo lo posible por ocupar el último lugar. En la sala de espera del médico, en la panadería, en la caja del súper, etc. Si jugaba al fútbol se aseguraba perder.

Se sentaba en la última fila de todos los foros, sean cines, teatros, conciertos, corridas de toros, circos, etc. Y asimismo en los transportes públicos, fuesen aviones, trenes o autocares.

Esperaba al fin que esa severa renuncia en vida resultase en provecho eterno.

Y sí, le llegó el momento de cosechar lo sembrado como le ocurre a todo mortal.

Presentado ante la puerta de perla ya estaba impaciente por ocupar el primer lugar en alguna nube.

—No, no nos consta su nombre entre los primeros. ¡Qué va!, está muy al final —dijo el ángel.

— ¿¡Toda mi vida ocupando el último lugar para ser el primero y ahora resulta que todo ha sido en vano!? —protestó Galdón.

— ¿Lo dice en referencia al texto bíblico de “los últimos serán los primeros”?

—¡¡Pues claro!!

—Nos ha de disculpar, resulta que un monje copista medieval que hizo la transcripción de ese texto sagrado se comió dos palabras. El texto original decía “los últimos, POR ALGO serán los primeros. Y quizá a usted le debe haber faltado ese ALGO.

— ¿¿Y en qué demonios consiste ese “algo”??

— Siento no poder satisfacerle, este cuento acaba aquí, ya entraríamos en otro cuento…

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