Simón Pedro en consulta

Un nuevo cuento de Antonio Cárdenas.

15 DE DICIEMBRE DE 2017 · 07:50

,

Simón Pedro fue atendido de urgencia por su psicólogo de cabecera.

—Estoy viviendo un estado de culpa que me produce vergüenza y temor. Siento como si me preparase para un castigo inminente y no sé cómo cortar este círculo vicioso. Temo convertirme en una mala persona, si es que no lo soy ya.

— ¿Desde cuándo se siente así?

—No sé, creo que desde que un gallo cantó dos veces.

— ¿Qué tal duerme por las noches?

—Mal, muy mal aunque no me quejo, Judas Iscariote ha acabado peor. Pero temo que esta ansiedad me pueda conducir a cometer una locura.

— ¿Este estado le impide hacer vida normal?

—No, pero la pesca ha mermado mucho, parece como si los peces me evitasen.

— ¿Sus relaciones afectivas se han visto afectadas?

—Un poco, mi suegra no me puede ni ver.

—No se preocupe, la culpa enfermiza es un estado químico del cerebro, no se haga caso, aprenda a convivir con ella y verá que así neutralizará sus efectos. También le recomiendo que se tome diariamente unas gotas de “flores de Bach” y verá que le ayudarán.

Cuando ya se despedían, al darse la mano en la puerta de la consulta, Simón Pedro no pudo reprimirlo más y confesó.

—Me siento muy mal, ¡he traicionado a un amigo!

—No se preocupe, siga mi tratamiento y en futuras sesiones trabajaremos unas técnicas disuasorias para romper ese círculo vicioso de que hablaba.

Pasadas unas semanas, Simón y su terapeuta se encontraron casualmente en un centro comercial de gran superficie. Acompañado de su suegra, Simón Pedro ofrecía un aspecto muy mejorado.

—Le esperaba ver en consulta en la fecha acordada. ¿Cómo no se presentó? ¿Acaso ha mejorado?

—Así es, todo ese estado tan complejo por el que iba de mal en peor ya ha desaparecido.

—Quizá las “flores de Bach”…

—¡No… que va! ¡El perdón de mi amigo!

Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - Cuentos - Simón Pedro en consulta