Giorgio Tourn y su obra de divulgación histórica y teológica

Tourn consigue un retrato fiel del personaje y de la época en que encarnó, tal vez como muy pocos en su momento, el espíritu de transformación espiritual y religiosa...

14 DE OCTUBRE DE 2016 · 11:10

Giorgio Tourn,
Giorgio Tourn

Un investigador incansable

Acaba de aparecer la versión castellana del libro Juan Calvino, el reformador de Ginebra (CLIE), del profesor, pastor e historiador valdense italiano Giorgio Tourn, traducido desde Suiza por Luis Vázquez Buenfil, doctor en sociología por la Universidad de Ginebra y periodista de larga trayectoria, con un prólogo del profesor Pierre Gisel. El libro original, publicado en 1965, lo ha reimpreso varias veces Claudiana, la benemérita casa editorial asentada en Turín.

Tourn, nacido en 1930, es un prolífico autor de obras de divulgación sobre la Reforma y el movimiento valdense. Además, ha sido presidente de la Sociedad de Estudios Valdenses y de la Fundación del Centro Cultural Valdense. Entre sus numerosos títulos están: I valdesi. La singolare vicenda di un popolo-chiesa (Los valdenses. La singular aventura de un pueblo-iglesia, 1977, traducido al francés, inglés, alemán y español: Colonia, Uruguay, Ediciones de la Iglesia Valdense, 1983); Los evangélicos y Marías (1987); Italiani e protestantesimo. Un incontro impossibile? (Italianos y protestantismo. ¿Un encuentro imposible?, 1997); Los valles valdenses (2002); I protestanti: 1. Una rivoluzione; 2. Una società; 3. Una cultura (Los protestantes: 1. una revolución; 2. una sociedad; 3. una cultura, 2007, 2013); La predestinazione nella Bibbia e nella storia (2008); También escribió una novela histórica sobre la repatriación de los valdenses, I giorni della Bestia (Los días de la Bestia, 1990).

Preparó la edición italiana de la Institución de la Religión Cristiana (1971, 1983) y colaboró, hace pocos meses en la recuperación de la película Fedeli per secoli (Fieles durante siglos), filmada entre 1924 y 1927, prohibida en su momento.1

Como se ve, sus continuas investigaciones lo han llevado a producir un conjunto formidable de volúmenes a través de los cuales es posible asomarse a la resonancia que tiene en su país (y fuera de él) el protestantismo, con todo y el número reducido de militantes de esa fe.

Recientemente, a propósito de las celebraciones de los 500 años de la Reforma luterana, escribió un texto provocador titulado “¿Reforma o refundación?”, en donde cuestiona las razones de fondo para avocarse o no a una conmemoración de los inicios del movimiento encabezado por Lutero en 1517. Al presentar sus objeciones para el concepto mismo de reforma, escribió:

Lutero y sus seguidores no estuvieron interesados en restaurar, es decir, “enmendar” la iglesia. En su opinión, no necesitaba reformarse sino refundarse sobre el único fundamento seguro: Jesucristo; y este milagro sólo podía lograrse mediante la Palabra, que es la fuerza del Evangelio. La Iglesia, aunque esté impulsada por la mejor buena voluntad, no puede reformarse, asumir otra “forma” respecto a la presente; no tiene la fuerza, la lucidez ni el coraje, pues sólo se barniza la fachada ya que sólo el Espíritu de Cristo puede crear lo nuevo en el mundo. Ése es el quid del problema.2

En esa ocasión aprovechó para criticar la actitud amistosa hacia la Reforma del papa Bergoglio, pero que, según él, no se ve acompañada de un genuino intento reformador al interior de la iglesia católica: “Lo cierto es que, en la base de su afirmación está una cuestión aún más compleja de la táctica curial: se trata de identificar dónde y cuándo hacer una reforma de la iglesia.

 

Portada del libro.

La idea de que, habiendo sida fundada por Pedro, permanece siempre idéntica a sí misma, mientras las demás, nacidas del cisma, viven en continuo cambio, forma parte de la apologética moderna del Concilio de Trento al Vaticano II, tal como sostenía Bossuet en su tratado sobre las variaciones del mundo protestante, aunque es evidente que la iglesia debe estar siempre reformándose.

A la luz de esta consideración de carácter historiográfico, se redimensiona el reformismo del papa Francisco, que no es moderno, ni mucho menos revolucionario, como afirman los laicos italianos, sino más bien expresión del tradicionalismo”.

Su visión de la Reforma es crítica y advierte sobre los riesgos de celebrar aspectos más bien secundarios y de repetir errores de apreciación en 2017: “La Reforma que recordaremos el año próximo no es sólo 1517 y las 95 tesis de Lutero sino también el Verdadero modo de reformar… sin el cual no habríamos tenido las iglesias evangélicas sino una cristiandad tridentina con algunas innovaciones.

Será bueno recordar la creatividad y tal vez los errores de la Reforma del siglo XVI; con mucho, la pregunta más difícil e importante será la manera de redescubrir los fundamentos de la fe cristiana en Jesús, y redescubrir el lenguaje para expresarlo en la sociedad secularizada y fundamentalista de hoy”.

 

La reforma calviniana en Ginebra

En el volumen que se acaba de reeditar, el traductor obtuvo una “palabra del autor” para que lo acompañasen, de modo que esa auto-presentación es un buen agregado para el lector de lengua castellana porque Tourn explica el propósito de la semblanza biográfica del reformador franco-ginebrino y la mentalidad con que abordó la tarea: “Se trataba de evocar a un personaje desconocido cuya biografía tiene muy pocas aventuras emocionantes, quien al parecer sólo vivía en los libros, pero que hizo historia. Hice todo lo posible para ‘contar al hombre de Ginebra” y pude constatar que la experiencia resultó emocionante, pero me fue mucho más difícil abordar su teología” (p. 5).

Gisel, a su vez, resume el contenido del libro al afirmar que el trabajo de Tourn consistió en contextualizar suficientemente al personaje, sin irse a los extremos de la apología o el rechazo gratuito, y destacando las diferencias fundamentales entre la Reforma ginebrina y la luterana desde una perspectiva muy alejada del triunfalismo de otras épocas:

Una vez más, se requiere dejarse instruir por el pasado —focalizarse sólo en el presente, puede resultar cegador—, pero no con el objetivo de repetir el pasado. Para los protestantes no se trata de repetir a los reformadores, sea Calvino o los demás. Como, para todos los cristianos, tampoco hay que repetir los comienzos del cristianismo. Asimismo, la distancia y la diferencia temporal no nos obligan solamente a reinventar, aunque esto lo reclama un pasado. Ésta debe ser también la ocasión para mejor medir los límites, las ambivalencias y los propios riesgos. No para hacer reproches a quienes nos precedieron sino para, nuevamente, dejarse instruir. Todo movimiento tiene sus ambivalencias y sus efectos instructivos, aunque no todos hayan sido los deseados. (p. 9)

A medio camino entre la biografía detallada y el análisis histórico bien situado (sin olvidar que sus lectores originales estaban poco familiarizados con los inicios del protestantismo), Tourn consigue un retrato fiel del personaje y de la época en que encarnó, tal vez como muy pocos en su momento, el espíritu de transformación espiritual y religiosa que se requirió para dar a luz no solamente una iglesia nueva sino también un nuevo modelo de ser humano y de civilización.

Los seis capítulos que componen la obra son precisos en la descripción del ambiente cultural y etológico, por lo que constituye una magnífica puerta de acceso a lo que se dio en llamar “la segunda oleada” de la Reforma Magisterial en Europa. Ojalá pronto se disponga de otras traducciones de autores italianos que, como Tourn, no cejan en su interés por que las comunidades protestantes profundicen en el conocimiento de su herencia espiritual.

1 Cf. L. Cervantes-O., “17 de febrero, fecha crucial para la historia valdense”, en Protestante Digital, 26 de febrero de 2016, http://protestantedigital.com/cultural/38712/17_de_febrero_fecha_crucial_para_la_historia_valdense.

2 G. Tourn, “¿Reforma o refundación?”, en Com-Unión, revista oficial de la Comunión Mexicana de Iglesias Reformadas y Presbiterianas, año 1, núm. 1, enero-junio de 2016, pp. 21-22, http://cmirp.org/num-01/, publicación original: Riforma, núm. 9, 4 de marzo de 2016, p. 14, texto en línea: http://riforma.it/it/articolo/2016/01/30/riforma-o-rifondazione. Versión: LC-O.

Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - Ginebra viva - Giorgio Tourn y su obra de divulgación histórica y teológica