El microondas

La finalidad del trabajo debería ser garantizar el sustento de todos, y no un medio para el lucro de unos pocos.

21 DE JULIO DE 2016 · 20:40

,

Hidalgo Doblegado—Vengo a acogerme a la amnistía para el “consumidor aprovechado”.

Funcionario— ¿Qué trae?

H—Un microondas con una antigüedad de diez años.

F— ¿Ya sabe que debiera haberlo cambiado a los tres años de su compra?

H—Este electrodoméstico es de fabricación antigua, cuando tenían una vida útil más prolongada.

F—Sí, pero la ley que penaliza el exceso de uso de electrodomésticos ya era vigente.

H—Y si aún funcionaba, ¿por qué tenía que cambiarlo? Nunca lo he entendido.

F—El Gobierno ha informado de ello hasta la saciedad. No se puede parar la rueda del consumo. Las empresas necesitan seguir funcionando y dando trabajo a todos sus empleados. Sin producir y consumir aumenta el número de parados y el estado no puede hacer frente al global de subsidios por desempleo.

H—Con esta amnistía, ¿se me exime de la multa?

F—Exacto, estará vigente durante todo este mes. Solo debe hacer entrega de cualquier electrodoméstico y adquirir otro nuevo que automáticamente dejará de funcionar a los tres años.

H— Por favor, ¿me podría dar el libro de reclamaciones?

F—Sí, por supuesto, puede exponer su queja, propuesta o reclamación que será debidamente atendida, siempre y cuando acate las normas para el consumidor.

Sr. Mandamás,

Un servidor no entiende que tengamos que multiplicar horas de trabajo para generar y adquirir continuamente productos de corta vida útil. ¿Qué tal si trabajásemos lo justo para lo necesario, útil y duradero? La finalidad del trabajo debería ser garantizar el sustento de todos y no un medio para el lucro de unos pocos que buscan enriquecerse gracias al trasiego consumista. Podríamos vivir todos holgadamente.

Fdo.: Hidalgo Doblegado

Sr. Hidalgo Doblegado,

Le agradezco su propuesta que se someterá a estudio. Por cierto, parece insinuar que hay algo más apetecible para el hombre que el enriquecimiento. Me extrañaría mucho que así fuese, pero si usted es poseedor de ello, le ordeno que lo entregue en mi oficina a la mayor brevedad. ¿Los señores de este mundo nos estamos perdiendo algo?

Fdo.: Mandamás

(Mateo 3:7)

Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - Cuentos - El microondas