‘La última carrera’, la otra vida de Eric Liddell

El atleta escocés Eric Liddell fue inmortalizado por el Séptimo Arte con la película ganadora de varios oscar “Carros de Fuego” (1981). El film cuenta las hazañas deportivas del famoso atleta que, por convicciones religiosas, renunció correr la prueba de los 100 metros lisos por celebrarse en el día del Sabbat, y por la cual fue seleccionado por su país para los Juegos Olímpicos de Paris de 1924.

Ahora se está preparando el rodaje de la segunda parte, “The Last Race” (La última carrera), una coproducción china y norteamericana. La película ya es en sí un todo un reto para los cristianos chinos, pues solo se autorizan 34 películas extranjeras al año para ser proyectadas en las salas de cine. Sería la primera vez que una película con un mensaje explícito se mostrase a gran escala por todo el país.

UNA VIDA A PRUEBA

Tras su merecida y memorable medalla de oro ganada en otra prueba (los 400 metros lisos), el atleta escocés dejó las pruebas de atletismo por otra clase de pruebas, la misión.

Se dedicó como misionero en China, país donde nació y en el cual sus padres eran a su vez misioneros. “The Last Race” cuenta este periodo concreto, sus últimos años y su muerte en un campo de prisioneros japonés, donde sucumbirá en 1943 de un tumor cerebral.

TESTIMONIO DE VALOR

Otro preso, Stephen Metcalfe, cuenta del escocés: “Liddell me regaló dos cosas. La primera fueron sus viejos zapatos de competición. La segunda, la mejor, su ejemplo para perdonar. Me enseñó a amar a mis enemigos, los japoneses, y a orar por ellos”.

Está previsto que la película esté terminada de rodar este mismo verano y debería poder verse en salas a partir de la próxima primavera.