Un niño de 11 años será Dios en ‘Exodus’

En una decisión que puede generar polémica, Ridley Scott eligió a un niño de 11 años para ponerle imagen y voz a Dios en su próxima película, «Exodus: Dioses y reyes», que relata cómo Moisés liberó al pueblo hebreo de la tiranía de los egipcios, y que llegará a los cines españoles el próximo 5 de diciembre.

Una elección que defiende el propio Scott en The Hollywood Reporter. «Los textos sagrados no proporcionan ninguna descripción específica de Dios, así que durante siglos artistas y cineastas han tenido que elegir su propia descripción visual», argumenta Scott.

Para aquellas escenas en las que Dios se comunica directamente con Moisés, el británico optó por un niño, Malak, interpretado por el joven Isaac Andrews, quien se encuentra con el liberador de su pueblo frente a un arbusto ardiente.

«Malak desprende inocencia y pureza y esas dos cualidades son extremadamente poderosas», añade Scott sobre un personaje que, más adelante en el largometraje, reaparece para guiar a Moisés, quien no tarda en advertir que quien habla por boca del pequeño es el Creador.

«Exodus: Dioses y reyes» se rodó parcialmente en España, entre Almería y Fuerteventura, y cuenta en su reparto con María Valverde, quien debuta en una producción de Hollywood en el rol de Séfora, la mujer de Moisés.

¿NUEVA POLÉMICA?

La polémica, según el rabino David Baron, del Templo de las Artes en Beverly Hills, citado por THR, puede estar servida. Y no sería la primera a la que se enfrenta el director de «Blade Runner» por esta película... sin que se haya estrenado todavía. La primera mecha la prendió la selección de actores blancos para interpretar a los protagonistas, mientras que otros intérpretes de raza negra se conforman con roles de villanos o esclavos.

«Egipto era (como es ahora) una confluencia de cultura, resultado de ser un cruce de caminos entre África, Oriente Próximo y Europa», se defendía hace unos meses Scott. «Elegimos destacados actores de diferentes etnias para reflejar esa diversidad cultural, de iraníes a españoles, pasando por árabes. Hay muchas teorías diferentes sobre el origen de los egipcios, y tuvimos muchas discusiones sobre como representar adecuadamente esta cultura».

EL PRECEDENTE DE DREAMWORKS

Como recuerda THR, el filme de animación «El príncipe de Egipto» ya se enfrentó en 1998 a la delicada tesitura de recrear la voz de Dios. Varios miembros del estudio responsable, DreamWorks, propusieron una solución que pasaría por la combinación de voces de hombre, mujer y niño, pero temieron que los espectadores lo rechazaran. Finalmente el encargado fue Val Kilmer, quien doblaba a Moisés.