¿Editorial o fábrica de libros?

VDM, una empresa dedicada a la publicación de textos académicos y religiosos, está a la caza de nuevos autores rastreando blogs y webs, como ha sido el caso de Protestante Digital, cuyos colaboradores han recibido estas últimas semanas su propuesta.

ESPAÑA · 07 DE AGOSTO DE 2013 · 22:00

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	Captura de pantalla de la web de Credo Ediciones.</p>
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Captura de pantalla de la web de Credo Ediciones.

Esta semana varios colaboradores de Protestante Digital han recibido en sus bandejas de entrada un curioso mensaje. Una editorial con sede en Alemania, Credo Ediciones, se ponía en contacto en un formato de texto casi-clónico que decía lo siguiente: “Me comunico representando a la editorial de textos religiosos cristianos Credo Ediciones (...) publicamos libros sobre teología, específicamente religiones cristianas, desarrollo de la espiritualidad y ayuda vital. Encontramos una referencia de su trabajo religioso sobre [insertar aquí título de artículo publicado en Protestante Digital]. Estamos interesados en publicar su trabajo en forma de libro impreso y de manera gratuita”, decía el texto del correo, firmado por la responsable del “Departamento de Adquisiciones” de la editorial. La oferta llamó la atención de varios autores, que comenzaron a preguntarse hasta qué punto se trataba de algo real o si era otro “timo de la estampita” de los que tanto abundan hoy en día en Internet. Las averiguaciones realizadas por Protestante Digital fueron en principio tranquilizadoras. Credo Ediciones forma parte de “uno de los grupos más grandes de la industria editorial internacional”, explican desde la misma a consulta de Protestante Digital. De hecho, pertenecen al grupo VDM publishing, siglas de Verdag Dr. Müller, empresa nacida en 2002 en Alemania que se dedica a la publicación de tesis y proyectos doctorales. Once años después, la firma ha crecido al punto de ofrecer otros contenidos temáticos, entre ellos el religioso. Definen su modelo de negocio como “innovador”, apoyado en el “sistema de impresión bajo demanda y pedido a la orden”, lo que según Credo Ediciones favorece “la distribución rápida y eficaz del conocimiento a nivel global a través de 80.000 librerías y más de 3.000 librerías online alrededor del mundo, como por ejemplo Amazon.com, Barnes & Nobles, Lightning Source y Morebooks”. Sin embargo ¿sería tan beneficioso para un autor publicar con Credo como lo pintan? Visitando su catálogo sorprenden tres cosas: la diferencia de precios -y el alto precio de la mayoría (apenas hay libros que bajen de 20 euros)-, lo desconocido que resultan sus autores, y la singular variedad de temas presentados. PRECIOS ALTOS, LIBROS INVISIBLES Sobre la política de precios, Credo nos aclara que estos “oscilan desde los 30 a 70 (premium 45 y 99) euros”. El precio varía por “diversos factores”, aunque hay un patrón común: cuantas más páginas, más caro. Sin embargo en el catálogo es posible encontrar algunos precios más bajos. Credo explica que a los autores, “antes de que el proceso de publicación del libro haya finalizado” le ofrecen la “oportunidad voluntaria” de reducir el precio del libro por medio de la compra de varias copias del libro con un importante descuento. Así, dicen, “una parte de los costos de producción serán cubiertos y el autor podrá recalcular el precio de su libro para la venta al por mayor”. La editorial aclara que se trata de algo completamente opcional; pero está claro que los autores que han realizado esta inversión comprando sus propios libros son los que salen más “beneficiados” al bajar el precio de su ejemplar, haciéndolo más asequible a otros compradores. Credo Ediciones ofrece luego el libro en las grandes plataformas de venta como Amazon o Barnes&Noble. Se trata de un ofrecimiento dentro de su catálogo general, ya que, recordemos, sólo imprimen los libros cuando son “pedidos” por alguien, lo que hace que en una tienda física sea prácticamente imposible ver un libro de Credo. La publicación del libro en formato digital ni siquiera se contempla. ESCRIBIR PARA CREDO Una de las cosas que más cuidan las editoriales es la selección de autores y obras, ya que en ellas está su prestigio y por tanto, su negocio. Pero editoriales como Credo no parecen demasiado preocupadas por cuidar lo que se publica. Por una parte, el hecho de que envíen correos masivamente a todos los autores de un medio – como ha sido en nuestro caso – resulta algo sospechoso. ¿Es lo mismo publicar un artículo sobre una crítica literaria que una exhortación teológica? Cualquier editorial realizaría algún tipo de discriminación, pero no es el modelo de Credo. Consultando su catálogo se puede poner en duda la idea de que publica libros “sobre teología, específicamente religiones cristianas, desarrollo de la espiritualidad y ayuda vital”. En una de las reseñas de uno de los ejemplares se define a Dios como “fuente de vida, algunos lo llaman Energía, Yo Soy, Cielo, Universo, Jehová, Tao según su cultura”, un mensaje totalmente alejado de la doctrina básica cristiana. No entramos a valorar la calidad de los escritos, pero se detectan abundantes faltas de ortografía, algunas en la misma portada de las obras, lo que hace cuestionable la revisión que esta editorial practica con los textos que publica. VÍNCULO CON EAE Otro dato destacable es que Credo Ediciones es una de las firmas de la Editorial Académica Española -también bajo VDM-, que ha recibido multitud de críticas por parte de académicos y universitarios del mundo hispano por esta forma de promoción y de negocio. La estrategia de EAE ha sido “rastrear” la base de datos de universidades de todo el mundo, ofreciendo la publicación de las tesis y trabajos doctorales. En el campo académico no tiene ningún prestigio la publicación bajo estas siglas. Lo cierto es que dar salida editorial a una tesis es un auténtico desafío, y parece que EAE lo pone al investigador “en bandeja”. Pero este material, casi imposible de comercializar y ofrecido a precios desorbitados, se convierte en un negocio rentable – eso sí, solo para la empresa - cuando tienes un inmenso catálogo que es posible rentabilizar, no tanto por las ventas comerciales, sino gracias a los autores que se “benefician” de la famosa “oferta de descuento”, seducidos con la idea de tener dos o tres copias de su trabajo por escrito y de que su libro esté “disponible” para su venta en todo el mundo. OTRAS -Y MEJORES- POSIBILIDADES Desde Protestante Digital consultamos con expertos del mundo editorial para que nos den su opinión sobre esta estrategia. ¿Es realmente beneficioso para un autor publicar en estas condiciones? “Este tipo de editoriales son más conocidas en Latinoamérica y el resto de Europa y recién están llegando a España. De hecho, aunque se hacen llamar editorial, técnicamente no lo son”, nos explican. “No ofrecen servicios editoriales como corrección del texto o maquetación, lo cual es fundamental, y no promocionan los libros que publican. Tampoco tienen un criterio de aceptación de textos ni autores, prácticamente imprimen cualquier cosa”. Y “aunque sus métodos son legales, éticamente son un tanto controvertidos”, apunta esta fuente. En opinión de este experto “las empresas se aprovechan de la inexperiencia de los autores noveles, y se venden como editoriales cuando no son más que gestores de publicación”. En el sector editorial hay otras empresas que aún llevan el asunto a niveles más preocupantes. “Me han llegado casos de escritores a los que les proponían publicarles sus novelas, y con la emoción que siente alguien ante eso no se fijaban en las cláusulas abusivas del contrato, aunque fuera legal. A veces imponen que sea el propio autor el que monte su propia presentación, y le obligan a vender como mínimo 100 ejemplares en un plazo de tiempo muy corto, y se reservan el derecho a no pagarle regalías si no se venden un mínimo de 2500 o 3000 ejemplares, en lo cual hay truco: primero, que nadie excepto los best-sellers llega a esos números de venta actualmente, desde luego no un autor novel; segundo, que ellos no promocionan el libro ni lo distribuyen por ningún lado, y sin visibilidad es imposible la venta”. Según esta fuente, para un autor novel hay posibilidades mucho mejores que la que ofrece VDM. “En plataformas como Bubok o incluso iBooks de Apple y Kindle de Amazon, puedes autopublicar cualquier texto con las mismas características que lo que te ofrece VDM y con el añadido de que no pierdes ningún derecho ni de reproducción ni de autoría (como sí ocurre con VDM); e incluso con Bubok prácticamente puedes ponerle el precio que quieras al libro, y la media suele estar entre 5 y 10 €, y puedes pedir copias impresas por el mismo sistema de VDM, el de impresión bajo demanda. La diferencia de precio entre un volumen autopublicado por Bubok y uno por VDM no es más que por el modelo de negocio de VDM que es en esos precios tan altos en donde encuentra su rentabilidad. A ellos no les cuesta nada el libro, con que vendan 2 o 3 ejemplares y saquen de ellos 20 o 30 € de beneficio (aunque sea que los compre el propio autor), ya le sacan provecho, sobre todo con una base de datos de más de 80.000 autores”. UN SECTOR EN TRANSFORMACIÓN Más allá de su conveniencia o no, el hecho de que comiencen a llegar propuestas como la de Credo a sectores temáticos específicos es una muestra de la evolución que está viviendo el sector del libro, que encuentra en Internet un nuevo escenario en el que desarrollarse, en el que la competencia no siempre se practica de las formas más éticas. Las polémicas en torno a los derechos, el choque entre las nuevas grandes distribuidoras y las librerías, o el empuje del ebook y las nuevas plataformas de lectura, son otros de los retos a los que la industria literaria se ve obligada a responder en la actualidad.

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