Paula Morales, en misión de Soria a Zambia

El pasado sábado 3 de junio se produjo en Soria la encomendación a la obra misionera de Paula Morales Martín. La Iglesia “Ven y ve” organizó un acto al que acudieron unas 280 personas. El evento evangélico había sido anunciado y promocionado en los medios locales y numerosas personas se acercaron gracias a la información recibida por estos canales.

En palabras de los pastores de la iglesia y encargados de la organización, “fue un gran tiempo y oportunidad de testimonio”. La predicación principal corrió a cargo de Daniel Benítez, obrero del Señor en San Pedro de Alcántara (Málaga).

ACTO PÚBLICO

La Iglesia de Soria situada en la calle Jorge Manrique 1, realizó el acto de encomendación de una de los miembros de su iglesia. “Queriendo poner a Dios en primer lugar y siendo nosotros, los personajes secundarios de lo que allí se estaba celebrando”, por deseo expreso de Paula, se desarrolló la reunión. Aparte de los miembros de la iglesia, acudieron personas procedentes de varias partes de España como Vitoria, Bilbao, Barcelona, Zaragoza, Torremolinos, San Pedro de Alcántara, Salamanca, León, Burgos, Jaén o Ávila. 

Dada la presencia de familiares y amigos que no están acostumbrados al vocabulario y para entender de una forma clara el acto que allí iba a suceder, uno de los pastores de la asamblea organizadora, Antonio Molina, se encargó de explicar en que consistía eso de la “encomendación”. 

“Nos hemos juntado como iglesia para enviar, apoyar y confiar en Paula, el propósito que Dios ha puesto en su corazón: trabajar con niños de la calle y enseñarles quién es Él”.  Por ello, expresó el deseo que comparte la iglesia en su conjunto de que “Dios la cuide, la guarde, la use y la proteja”. 

El coro, formado por miembros de la Iglesia de Soria y alrededores, cantaron varias canciones y entre ellas, quizás la más especial, un tema en zambiano que lleva por título “Tulemi totela” que significa “Te damos gracias” y con el que quisieron expresar la gratitud que sentían de la oportunidad que Paula tiene de llevar a cabo este trabajo en el continente africano. 

SENTIMIENTOS ENCONTRADOS

Un doble sentimiento de alegría y tristeza, estuvo presente durante toda la tarde. “Alegría porque sabemos que es algo para lo que ha estado preparándose toda la vida y tristeza, porque nos toca separarnos de ella” afirmaron varios de los hermanos allí presentes. 

Además del coro, los niños de la escuela dominical, le dedicaron un acróstico con su nombre, en el que le deseaban lo mejor, le dejaron que claro “que la iba a echar de menos” y le prometieron “que siempre iban a estar con ella”, algo que hizo saltar las lágrimas a la ya joven misionera.  Otro de los momentos más emocionante de la tarde, fue cuando al estrado subieron los padres de Paula. Juan Luis Morales, pastor de la Iglesia de Soria, y Raquel Martín, quisieron dedicarle unos versos, esperando entusiasmados a que Dios “les llene de nietos y que les puedas transmitir a los niños de la calle la fe que comparte con ellos”.

Como en cada acto de estas características, no faltó la reflexión y la lectura de la Biblia. El encargado fue Daniel Benítez y quiso hacer un mapa conceptual sobre: la misión de un misionero, los peligros, el objetivo, las renuncias y varios componentes más que a partir del momento en el que se dedique íntegramente al trabajo con los niños, se va a encontrar.

“Cierto es que en la actualidad está normalizado el hecho de que las personas realicen voluntariados o se hagan miembros de ONGs y viajen a otros países por caridad, lejos de desprestigiar este trabajo” afirmaba Benítez “hay una diferencia entre ser “misionero” y “componente” de una ONG.  “Ser misionero, no es un acto de caridad, es responder a la llamada que Dios te hace”, reflexionaba el pastor afincado en Málaga. ”No sabemos a lo que tendrá que enfrentarse Paula, pero lo que sí sabemos, es que pase lo que pase, Dios va a estar a su lado”.

Respecto a su labor y como otra de las diferencias con los cooperantes, “Paula no va a Zambia solo a mejorar las condiciones de los niños de la calle, sino que pretende transmitirles el amor que ella conoció desde pequeña y  del que están tan necesitados allí, “el amor de Dios”. Su responsabilidad, y la misión para la que ha sido elegida, debe ser su prioridad en todo momento y “no apartar la mirada de aquel que te guía”, recordaba. Y citando las palabras del apóstol Pablo a Timoteo, finalmente le animó a cumplir con su misión. 

A LA TIERRA ADOPTIVA DE LIVINGSTONE 

El médico, explorador y también misionero británico, David Livingstone, estuvo muy presente en el acto. Durante varias décadas, el misionero inglés llevó a cabo una intensa lucha en contra de la esclavitud y habló de Dios a los pueblos indígenas, finalmente murió en una pequeña aldea de Zambia y en su tumba en la Abadía de Westminster, escribió lo siguiente: “Todo lo que puedo decir en mi soledad es: que tengo la esperanza de que la bendición del cielo caiga sobre todos - americanos, ingleses, turcos,... - que ayuden a sanar esta llaga abierta del mundo”,  una frase que estuvo y ha estado muy presente en la vida de Paula.

Finalmente y como clausura del acto, Guido Schultess, pastor de una Iglesia de Burgos y Fernando Blanco, homólogo en Zaragoza, así como los responsables de la iglesia de Soria, oraron por Paula y pidieron la bendición de Dios una vez más.  A día de hoy, Paula espera ya la llegada del mes de julio para partir hacia el que va a ser su hogar, el centro de niños Abba’s Heart en la ciudad de Kitwe.

UNOS LLEGAN Y OTROS SE VAN

La iglesia de Soria siempre ha tenido una gran labor misionera, ha organizado varias carreras benéficas en favor de países desfavorecidos y proyectos sociales e incluso unas jornadas misioneras, en las que personas repartidas por el mundo, se dieron cita en la provincia, para explicar su labor, su actuación y formar a aquel que lo quisiera para seguir sus pasos. 

Cuentan con una ONG, a través de la cuál han llevado a cabo las acciones citadas anteriormente y desde el mes de junio, se han incorporado a su iglesia los misioneros Donald y Ericka Solano de Costa Rica, a ocupar el sitio que previamente tenían Jaime y Carmen Stunt. 

ORIGEN Y FORMACIÓN

Paula Morales Martín de 24 años, soriana de nacimiento, ha decidido dedicar su vida al trabajo con los niños en las calles en el continente africano. Desde temprana edad nació en Paula el deseo por servir. A sus espaldas tiene la participación en varias campañas evangelísticas en Madagascar, ayuda y servicio en colaboración con la misionera Collen M Redit en la India, un viaje misionero a Marruecos, entre otras... pero no solo de experiencias está formado este ‘currículum’ sino que Paula ha estudiado y se ha formado para realizar su misión entre niños. 

Es graduada en Magisterio Infantil de Inglés y ha estudiado en el centro de formación misionera OM, en Zambia, país en el que continuará con la obra de la que lleva tiempo formando parte,... Abba’s Heart, un centro de ayuda y recogida de niños que viven en la calle. Estuvo ayudando de profesora, y a partir de Julio será coordinadora del hogar de recogida de niños.  Antes de ser enviada al país africano, Paula ha estado durante seis meses sirviendo a tiempo completo en su iglesia, ayudando con la escuela dominical, el trabajo con los jóvenes, el ropero solidario, ONG y varias actividades en las que está inmersa la iglesia.