Alcalde de Las Palmas alaba la obra social de evangélicos canarios

El alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Augusto Hidalgo, participó este sábado en el VI Desayuno de Año Nuevo organizado por el Consejo Evangélico de Canarias, durante el cual pudo conocer la labor social que la congregación evangélica desarrolla en las siete islas del archipiélago canario, y en especial en Las Palmas, la capital grancanaria.

En el encuentro, en el que también estuvo presente el concejal de Movilidad, Ciudad de Mar y Distrito Centro, José Eduardo Ramírez, participaron más de ochenta pastores evangélicos de toda la isla.

La comunidad evangélica cuenta con 5.000 miembros y 30 iglesias en Las Palmas de Gran Canaria.

Rafael Hernández, miembro de la junta directiva del Consejo Evangélico de Canarias, agradeció la presencia del regidor en el encuentro. "Es el primer alcalde que participa en un acto de estas características" y apuntó que "el pueblo evangélico es muy comprometido y está muy implicado en dinamizar activamente la sociedad".

Durante el desayuno, distintos miembros de la congregación enumeraron y detallaron las principales labores sociales que desarrolla esta comunidad (además de su labor espiritual), entre las que destaca la asistencia en hospitales y centros penitenciarios, comedores sociales, banco de alimentos, y ocio saludable, entre otros.

PALABRAS DEL ALCALDE

El alcalde reconoció la "importante" labor social que lleva a cabo esta congregación: "Les he agradecido el trabajo social que realizan en todos los barrios de la ciudad. La comunidad protestante ha sido parte de Las Palmas de Gran Canaria desde el siglo XVII, es parte de la historia de esta ciudad y la Administración debe estar agradecida del trabajo social están haciendo en el conjunto de la ciudad".

"Creo que cualquier mandatario o responsable público debe conocer la pluralidad de la sociedad en la que vive. Las Palmas de Gran Canaria es una ciudad cosmopolita que ha tenido todo tipo de influencias culturales, religiosas también, y es producto de esa mezcla, de ese crisol. Es una ciudad abierta donde todas las religiones y culturas pueden convivir pacíficamente y con normalidad", expresó Augusto Hidalgo, que agradeció la invitación al acto.

La relación con la Administración local, dijo, "debe ser de entendimiento, para que se puede realizar la actividad de culto con libertad y que al mismo tiempo la actividad social que realizan se desarrolle con las mejores garantías".