Misión Urbana recibe 400 kg de alimentos para los más necesitados de Madrid

El Día Nacional de Oración, celebrado el pasado sábado 8 de junio en España, también tuvo una vertiente solidaria. En Madrid, la organización citó a una Unidad Móvil en la que muchos manifestantes pudieron donar sangre. No existen datos de cuántos evangélicos participaron de esta iniciativa, pero sí de la cantidad de alimentos no perecederos recogidos para ser distribuidos entre los más necesitados por la ONG Misión Evangélica Urbana de Madrid, que fue la segunda propuesta solidaria de la plataforma "España Oramos por ti". En un breve mensaje de agradecimiento, Bianca Lauran –trabajadora social y directora de Misión Evangélica Urbana de Madrid- informaba que durante el acto del 8 de junio se recogieron en la Puerta del Sol más de 400 kg de alimentos no perecederos, que serán distribuidos entre los más necesitados. “Gracias a la recogida de alimentos realizada durante la Jornada de oración, se han podido recoger más de 400 kilogramos de alimentos no perecederos. Estos serán empleados en el reparto semanal para las familias con niños y personas en riesgo de exclusión social que viven en nuestra ciudad”, dice Lauran, con palabras de agradecimiento para los organizadores del evento, las personas que han compartido y para Dios. Era la primera vez que “España Oramos por Ti” realizaba una propuesta de este tipo, lo que induce a pensar que en la medida de que ésta se repita y consolide, la ayuda recogida puede ser mucho mayor, ya que muchos de los asistentes no lo recordaron, o no se enteraron a tiempo de la iniciativa. No obstante, 400 kg de alimentos son una cantidad nada despreciable dadas las circunstancias, en momentos en que el Banco de Alimentos no da abasto para satisfacer la creciente demanda de las ONG que se dedican a prestar esta asistencia básica entre los más castigados por la crisis. MISIÓN EVANGÉLICA URBANA DE MADRID Misión Evangélica Urbana de Madrid (MEU) lleva desde 1985 asistiendo a los excluidos de la red social del Estado, proveyéndoles gratuitamente de ropa, alimentos, talleres formativos y orientación sociolaboral, entre otras cosas. Igual que otras muchas ONG y parroquias evangélicas, MEU ha visto multiplicarse en los últimos años la cantidad de personas que acuden a sus puertas en busca de ayuda, a las que intentan asistir.