España: falleció el marido de Beni Moreno, presentadora del programa evangélico en TVE2

Según refiere el entorno de la familia, Fernando Tercero se encontraba mal desde hace unos días, pero nada hacía presagiar una situación de gravedad. La mañana del pasado miércoles 22 de diciembre, le han encontrado ya sin vida en su domicilio en Madrid. Por imperativo legal, este tipo de fallecimientos bruscos e inesperados, sin causa evidente de la muerte, obliga siempre a la realización de la autopsia; por lo que al dolor de la pérdida súbita del ser querido se añadió la situación difícil de espera de los trámites legales hasta poder velar al fallecido. Toda la familia evangélica y quienes les conocen no pueden más que recordar con cariño a Beni, el rostro dulce que acompaña cada domingo el programa evangélico de TVE2 (Buenas Noticias TV), y a su marido Fernando. El matrimonio tiene dos hijos. Jose Pablo Sánchez, director del programa evangélico en TVE2, hablaba anteayer "casi sin palabras por el dolor" al informar a este medio de la noticia. Por ello, y junto a la esperanza eterna de la fe de quienes esperan otra vida mejor en Jesús, todos nos unimos para pedir que el Dios altísimo dé fuerzas y conforte a toda la familia y amigos cercanos de Beni Moreno en estos momentos difíciles. FUNERAL Y ENTIERRO No pudo realizarse velatorio, ya que el cuerpo fue trasladado directamente desde el Instituto Anatómico-Forense, situado en la Universidad Complutense de Madrid, hasta el cementerio de Torrejón de Ardoz. El funeral se realizó la tarde del jueves 23 de diciembre, en el tanatorio del cementerio de Torrejón de Ardoz (Madrid). Una gran cantidad de familiares, amigos y hermanos en la fe abarrotaron la sala, hasta el punto de ocupar gran parte del patio exterior. Más de 200 personas asistieron al acto, en el que la palabra estuvo a cargo de Jose Pablo Sánchez, que habló de las preguntas sin repuesta que toda persona, incluidas los creyentes, tenemos ante Dios. la respuesta, dijo, no la tenemos muchas veces, salvo aceptar la soberanía de Dios por encima de nuestras vidas, confiando en Él, o rebelarnos en una decisión que nos lleva a la amargura. Al acabar el acto se procedió a la incineración de lo restos mortales de Fernando.