Católicos y protestantes trabajarán juntos en Centro de Acogida de Santander

La víspera de Nochebuena será inaugurada la zona de albergue temporal, con 50 plazas, a la espera de ayudas para desarrollar el proyecto solidario en su totalidad. En este emprendimiento participan un grupo de voluntarios, las religiosas de Hijas de la Caridad, la asociación Nueva Vida y otras entidades civiles, siendo notoria la ausencia del Gobierno de Cantabria. El centro será atendido por organizaciones católicas y protestantes, que trabajan con el cristianismo como base. Una religiosa de las Hijas de la Caridad será las encargadas de la evaluación de quienes se acerquen hasta este albergue y la asociación protestante Nueva Vida prestará el apoyo social nocturno y diurno, con siete profesionales. Por su parte, la cooperativa de parados Coorcopar, por su parte, elaborará los desayunos y las cenas que serán servidos por los voluntarios. Al explicar cómo funcionará el centro, el alcalde Íñigo de la Serna dijo que el programa de acogida se mantendrá a cargo de las Hijas de la Caridad y la Asociación Nueva Vida, mientras que el programa general de inserción será atendido por los técnicos de los servicios municipales y sus educadores y trabajadores sociales. La limpieza y mantenimiento serán de empresas privadas y la Policía Local prestará servicio día y noche. En este entramado, coordinado desde el Ayuntamiento, no faltan la red de voluntarios municipales y de las asociaciones entidades participantes en el proyecto.“Ellos nos han ayudado desde el primer momento para que abramos este centro aunque no tengamos apoyo del Gobierno de Cantabria” dijo el alcalde. “Los voluntarios son fundamentales en este proyecto ilusionante y les estamos inmensamente agradecidos por su apoyo”, señaló. La falta de recursos motiva que el nuevo centro se inaugure de momento parcialmente, con cincuenta camas en la zona de dormitorios para cogida durante cuatro días. “Pero no podemos esperas más”, dijo De la Serna. “Con esfuerzo extra del Ayuntamiento y con el apoyo de las ONG y voluntarios tiramos para adelante y abrimos la zona de corta estancia. Pero seguiremos buscando ayudas y apoyos para poner en marcha todo el proyecto”, concluyó.