Introspección

Cada uno ha de mostrar a través de sí mismo lo que habita en su interior, lo que realmente es, pero nadie puede otorgar lo que no tiene  ni esperar poseer aquello que no existe.

14 DE MARZO DE 2018 · 10:05

,

¿Qué valor tiene lo que realmente tiene valor?

Tú sabes bien de que hablo, y por ello has sentido un resquemor en el alma al comprender mi pregunta y sentir que estabas solo.

Sin apenas darte cuenta has ido perdiendo tu vida entre quehaceres absurdos que nunca aportaron nada nuevo, nada útil.

Pretendías huir de ti mismo, acordonar tu vida para poder existir en una atmósfera plagada de orfandad. Ahora, el destierro no te parece tan maravilloso.

No tienes nada que ofrecer, piensas que ya has dado suficiente y que es tiempo de sentarte en la linde del sendero para ver pasar la vida, la tuya , la ajena, sin tener que ser partícipe de nada de lo que ocurre a tu alrededor.

No puedes ofrecer nada, porque no tienes nada.

No busques atisbos de amor, hace tiempo que desechaste ser querido.

Si eres incapaz de amar, no puedes dar amor.

 Si eres incapaz de pedir ayuda, no estarás preparado para ofrecerla.

Vives dentro de tu mundo cercado por un muro de querencia absurda a un ideal.

¿Aún no te has dado cuenta que eres una vil marioneta que mueven a su antojo?

Amarás a tu prójimo cuando aprendas a amarte ti mismo.

Valorarás a otros cuando descubras tus propios valores.

Serás capaz de sonreír sin miedo el día que descubras una sonrisa amiga en un rostro extraño.

Nadie puede dar lo que no tiene, así que no busques en otros la perfección que nunca tendrás, la compasión que nunca has mostrado, el afecto que ignoras, la valentía que no has tenido.

Acuna en tu interior aquellas virtudes que deseas ver crecer y riégalas con el agua de tu constancia. Recogerás valores que nunca creíste que pudieras poseer y encontrarás que los demás pueden ser receptores de todo lo que hay en ti.

Cada uno ha de mostrar a través de sí mismo lo que habita en su interior, lo que realmente es, pero nadie puede otorgar lo que no tiene  ni esperar poseer aquello que no existe.

Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - Íntimo - Introspección