30 de julio. Día Internacional de la amistad

Un día surge la duda y deseas cerciorarte de que aquella amistad es verdadera ya que sospechas algo, ya que notas un no sé qué raro y la confianza no parece ser reciproca.

28 DE JULIO DE 2017 · 14:00

Chica tribal poniendo una pulsera /  Satbir Singh (flicker - CC BY 2.0),
Chica tribal poniendo una pulsera / Satbir Singh (flicker - CC BY 2.0)

Pasa que a veces tienes un amigo o amiga de hace años. El cariño te lleva a poner con gusto más y más de ti. Te entregas por completo, pero un día, quizá por causa del viento de levante, surge la duda y deseas cerciorarte de que aquella amistad es verdadera ya que sospechas algo, ya que notas un no sé qué raro y la confianza no parece ser reciproca.

Te da por hacer balance y acometes la prueba de retirar todo lo que has puesto en esa relación, para ver qué es lo que queda de parte del otro, y compruebas que esa amistad ha subsistido gracias a ti.

Te duele. Te derrumbas.

Sabes que de ahí en adelante te va a costar volver a creer en alguien más. Te prometes a ti mismo no intentarlo para evitar sufrir de nuevo el mismo dolor que ahora estás sufriendo.

Y es que la amistad es así, puede cambiar de aspiraciones y está en todo su derecho a hacerlo, cada cual es libre a su manera.

Hasta ahora habéis caminado juntos y de pronto un día, el otro, por voluntad propia, se queda enganchado a la rama de un árbol del camino por donde transitabais la vida juntos y a pesar de querer desengancharlo ves que no puedes, ni el otro quiere desengancharse y se empeña, además, en quedarse ahí atrapado y atrapado ahí se siente a gusto.

Te duele no tener la opción de pararte tu también, de dar marcha atrás y tienes que continuar. Al apartarte, dado lo acontecido, tal vez pienses  tomar la decisión de caminar por una vía diferente. No hay vuelta atrás y, además, necesitas olvidar y volver a esperanzarte.

La vida empuja siempre hacia delante. Nick Drake dice: “Por eso has de dejar los caminos que te hacen ser lo que en realidad no quieres ser, has de dejar los caminos que te hacen amar lo que en realidad no quieres amar”.

Puede ocurrir, y de hecho ocurre, que cuando tus heridas sanen, encuentres una nueva amistad y te ilusiones, sientas que regresa el deseo de estrenarla.

Llegará, estoy segura. La verás de frente, cualquier día, cualquier año, en ese camino naciente que has elegido ahora. Sé valiente. Confía.

Publicado en: PROTESTANTE DIGITAL - Tus ojos abiertos - 30 de julio. Día Internacional de la amistad